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Dos refugiados sirios salvan a un líder neonazi alemán tras sufrir un accidente

El político neonazi Stefan Jagsch, del partido NPD, en un cartel de la formación racista que pide la "libertad de expresión".

Desalambre

Un responsable del partido neonazi alemán NPD (Partido Nacional Democrático), protagonista de marchas xenófobas contra los refugiados, encontró en aquellos que tacha de “enemigos” a sus salvadores. Stefan Jagsch sufrió un accidente de coche el pasado miércoles y dos refugiados sirios le socorrieron antes de que llegaran los bomberos, según cuentan varios medios alemanes.

Stefan Jagsch, de 29 años y cabeza de lista del NPD en Altenstadt en las elecciones regionales que ha celebrado este mes el país germano, chocó con su vehículo contra un árbol y quedó gravemente herido. Por el lugar del accidente pasaron dos autocares con refugiados y dos de ellos atendieron a Jagsch antes de la llegada de los bomberos.

Los ciudadanos sirios bajaron al herido del coche y aplicaron técnicas de primeros auxilios al líder del partido xenófobo, según explicó un portavoz de los bomberos a la agencia alemana de noticias Dpa.

Este martes Stefan Jagsch continuaba en el hospital, según informa Frankfurter Runsdchau, que ha recogido las palabras del presidente del NPD en Hesse, Jean Christoph Fiedler, que calificó el proceder de los refugiados como “muy bueno”.

El partido NPD es una formación xenófoba de extrema derecha, antisemita y revisionista, que en este momento está siendo juzgada y podría ser prohibida por su ideología nazi.

Aunque apenas tiene apoyo a nivel nacional, en las pasadas elecciones regionales el partido obtuvo mejores resultados, al igual que otras formaciones racistas, como el AfD. En el municipio en el que tuvo lugar el accidente, el NPD alcanzó el 10.2% de los votos, destaca The Guardian.

El pasado 12 de marzo, la formación fue una de las protagonistas de una gran marcha en contra de los demandantes de asilo en Berlín, que congregó a unos 3.000 manifestantes de estrema derecha.

En enero, Stefan Jagsch participíó en una reunión y marcha en la que se tachó a los refugiados de “primates sin ley” e “invasores”.

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