Alberto Nadal defiende su reforma energética porque da estabilidad frente a una política de buenos y malos

El secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, ha defendido hoy la reforma energética aprobada por el Gobierno al considerar que da estabilidad al sector frente a la política “de buenos y malos” puesta en marcha por “gobiernos de otro signo”.

Durante la presentación del estudio de FAES “Propuestas para una estrategia energética nacional”, Nadal ha criticado el “caos” que reinaba en el sector eléctrico, donde “cada cosa tenía una retribución distinta”, en función “del éxito que habían tenido (las empresas) al visitar los distintos despachos ministeriales”.

Nadal ha tachado de “ideológico” el debate energético de los últimos años, basado en un apoyo a las renovables en un momento en que todavía eran tecnologías inmaduras, porque se llevaba a cabo sin “mirar los números”.

“Todo tiene su cabida”, ha subrayado, pero “cargar el recibo de la luz para apostar por una determinada tecnología” cara constituye un “error” que “acaba pagando el consumidor”. El otro error, ha añadido, fue intentar impulsar industrias desde el Boletín Oficial del Estado (BOE)

Frente a esto, el Gobierno ha establecido unas “reglas claras de retribución” para todos los sectores regulados (transporte, distribución, renovables, etc.) con el objetivo de crear “un marco de estabilidad financiera que garantice el futuro del sector”.

Ha considerado que España cuanta con un sistema energético de calidad, pero tiene “un problema”, que es “enormemente caro en relación a los países de nuestro entorno”, lo que se refleja en los precios que pagan consumidores domésticos y empresas.

En su opinión, esta subida de los precios y el déficit eléctrico generado -una deuda que suma más de 26.000 millones de euros, resultado del desfase entre los ingresos y los gastos del sistema- se debe a “errores de política energética (del Gobierno socialista) que ahora lo estamos pagando”.

“Cuando subimos el precio de la electricidad, del gas, son pérdidas de trabajo”, ha asegurado, para defender que “controlar esos costes es ganar puestos de trabajo”.

“A corto plazo, lo que hemos hecho es frenar la sangría y garantizar las condiciones para que esto no se vuelva a repetir”, al mismo tiempo que “pone las bases para una energía más barata para España”.

“La gran diferencia entre este Gobierno y las medidas anteriores es que este ha intentado una solución definitiva del problema”, ha apuntado.

Posteriormente, en declaraciones a los medios, Nadal ha afirmado que el Fondo de Amortización del Déficit Eléctrico (FADE) “tal y como está diseñado es un instrumento cerrado” y ha insistido en que la previsión para este año es que haya equilibrio en el sistema eléctrico.

“Si se produce algún desequilibrio por motivos no previstos ya se vería qué hacer”, ha señalado después de insistir en que la orden de peajes, donde se prevén ingresos y costes del sistema, estaba hecha “en equilibrio”.

También ha señalado su intención de “actualizar” el funcionamiento del mercado eléctrico mayorista y de emprender una reforma del sector gasista “con reglas claras” y que incluirá la creación de un mercado secundario, ya que actualmente funciona con contratos bilaterales.