La nueva PAC se estrena con la incertidumbre del presupuesto para el campo

La nueva Política Agrícola Común (PAC) se estrena hoy con la incertidumbre sobre el presupuesto que llegará al campo, en un año de transición en el que Castilla y León aspira a mantener los cerca de 1.150 millones de euros anuales que hasta ahora recibía de la Unión Europea.

Los responsables de las organizaciones agrarias de la Comunidad, en declaraciones a EFE, han coincidido en advertir que la nueva PAC para el periodo 2014-2020 todavía tiene que aclarar qué fondos recibirán los beneficiarios de las ayudas europeas.

Hasta ahora, Castilla y León contaba con casi 924 millones de euros del denominado Pago Único o ayudas directas, más cerca de 226 millones vía desarrollo rural.

El año que comienza será de transición, ya que se mantiene la normativa de la PAC debido a que no da tiempo a aprobar una nueva acorde con la última reforma aprobada en la Unión Europea, ha explicado el presidente de ASAJA en Castilla y León, Donaciano Dujo.

Por ello, “faltan muchas cosas” por concretar, como el nuevo presupuesto, aunque el presidente de ASAJA espera que se mantenga “más o menos el mismo dinero”.

Aunque ya no habrá recortes como el de la modulación, que en 2013 conllevó un 10 por ciento menos en ayudas directas, se pueden producir otros debido a correcciones financieras, ha advertido.

El responsable de la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), Jesús Manuel González Palacín, ha recordado que 2014 llega con “la misma PAC” en cuanto a normativa, pero “con presupuesto nuevo”, que cuanto más se tarde en concretar, “más incertidumbre se genera en el sector”.

González Palacín ha subrayado que en 2013 ya se aplicaron recortes del 2,4 por ciento en las ayudas, por la denominada disciplina financiera de la Unión Europea, o del 2,5 por ciento por superar en España el conocido como techo nacional de fondos europeos para el sector agrario.

Por parte de la Alianza UPA-COAG, Julio López ha recalcado que “posiblemente habrá menos dinero”, además de que no se han resuelto aún “incógnitas” sobre distintos cultivos y tipos de ganadería.

Al respecto, ha citado el caso de la remolacha, uno de los cultivos que en España lidera Castilla y León, para el que no se han cerrado precios, con la consiguiente inseguridad para el agricultor.

Las tres organizaciones confían en que durante las negociaciones sobre cómo se aplica en España la nueva PAC el Gobierno asuma la demanda de Castilla y León de que las ayudas europeas sean para los verdaderos profesionales del campo, los ahora denominados “activos”.

Aunque el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, se haya mostrado contrario a esta petición en sus últimas visitas a la Comunidad, “sí tiene visos de salir adelante”, ha comentado Dujo.

“Ya hay varias comunidades que defienden lo mismo que Castilla y León”, ha añadido González Palacín, “por justicia” y “por imagen social”, para acabar con grandes beneficiarios de ayudas agrarias que no son ni agricultores ni ganaderos.

La Alianza UPA-COAG ha defendido que la figura del profesional activo es esencial para atraer jóvenes al sector, en el que apenas un 10 por ciento de sus agricultores y ganaderos tiene menos de 40 años.