La castaña, una rentabilidad por descubrir en la península Ibérica

Un total de siete colectivos, cinco de Portugal y dos de España, se han unido en un proyecto de cooperación que pretende sacar la mayor rentabilidad posible a la producción de frutos secos y, en especial, a la castaña que se recolecta entre Portugal y la región de Castilla y León.

Desde la promotora de la iniciativa, la Comunidad Intermunicipal Beiras Sierra de Estrela (CIMBSE) de Portugal, explicaron a EFE que se trata de un proyecto valorado en medio millón de euros que, a través de fondos POCTEP (Programa Operativo de Cooperación Territorial entre España y Portugal) desarrollará acciones entre productores de los dos países.

Flavio Florencia, técnico que ha desarrollado el proyecto, dijo a EFE que una de las líneas de actuación será la promoción de la producción y la competitividad de las zonas en las que se produce la castaña, en territorios como la Sierra de Estrela lusa, la región de la Beira y las provincias españolas de León y Ávila.

A través del proyecto se propiciará la asistencia técnica a productores que quieran mejorar su cosecha de castaña y también se fomentarán líneas que permitan mejorar los procesos de transformación.

De esta manera, se abordarán procesos que permitan una mayor capacidad de resistencia a los castaños ante plagas como las de la tinta o el chancro y se experimentará con diferentes variedades de frutos para analizar sus rendimientos.

Otro de los objetivos del proyecto es el de transferir el conocimiento de iniciativas de éxito puestas en marcha por agricultores de ambos países.

Para desarrollar todas las acciones, la iniciativa cuenta con siete socios: CIMBSE, Asociación de Agricultura de Portugal, Universidad de Coimbra, Universidad Beira Interior, Instituto Politécnico de Guarda, la Diputación de Ávila y la Asociación para el Desarrollo Sostenible de la provincia de León.

Durante el otoño, en la región centro y norte de Portugal y en algunas zonas de montaña de Castilla y León se recogen varios millones de kilos de castaña y, según los responsables del proyecto, es necesario obtener una mayor rentabilidad.

Sobre todo, propiciar que haya “una comercialización sin intermediarios”, manifestó Flavio Florencia.

Amilcar Salvador, alcalde de Trancoso, pueblo próximo a Salamanca, donde hay un millar de productores de castaña, dijo a EFE que la recolección de la castaña supone para esta zona un movimiento de tres millones de euros y genera empleo para unas 2.500 personas durante la temporada.

En la Feria de la Castaña de Trancoso que se celebra estos días se pueden comprobar diferentes potencialidades del producto, tales como la elaboración de harina apta para celíacos o la fabricación de cerveza.

Silvia Santos es una productora lusa de la localidad de Vinhais que elabora harina y cerveza de castaña en la variedad artesanal tostada.

“La harina de castaña es muy buena para la dieta de los celíacos, ya que no tiene gluten”, asegura a EFE.

Esta harina, que la van a comercializar en Francia, tiene un precio de venta al público de unos 22 euros por kilo.

Durante la Feria de Trancoso, numerosos expositores muestran las múltiples aplicaciones de la castaña para elaborar recetas, sobre todo de repostería.