Opel replica la 'fórmula Astra' en su imponente Insignia

Tras presentarse mundialmente en el pasado Salón de Ginebra, Opel ya vende las primeras unidades del nuevo Insignia, su modelo más grande y distintivo. Llega a los concesionarios este mes de junio con dos carrocerías, de cinco puertas (Grand Sport) y familiar (Sports Tourer), un diseño atlético que causa el aumento de sus dimensiones, un equipo tecnológico actualizado y motores y transmisiones de nuevo desarrollo.

Basado en el prototipo Opel Monza (2013), el nuevo Insignia tiene el importante reto de superar las 900.000 unidades vendidas del modelo anterior, lanzado al mercado en 2008, actualizado en 2014 y desfogado en su fase final, coincidiendo con el envejecimiento natural del modelo y el viraje del cliente hacia los SUV, segmento en que Opel tendrá tres modelos antes de 2018.

En un primer vistazo lo que más llama la atención de las dos versiones del Insignia es su tamaño, ambas superando los dos metros de ancho, la berlina con 4,90 metros de largo y el familiar rozando los cinco. Son medidas que superan por mucho a sus rivales naturales (por menos a los Mazda 6 y Ford Mondeo), coqueteando con el segmento E, el de las berlinas grandes, donde abundan las marcas de lujo.

Diseñado y desarrollado con una arquitectura completamente nueva, la línea exterior del Insignia de cinco puertas imita a un gran coupé, con voladizos recortados, batalla alargada y una marca caída de techo hacia la zaga. Opel declara un coeficiente aerodinámico de 0,26, de los más bajos del segmento, y lo más importante, una rebaja en el peso total de hasta 175 kilogramos (200 en la versión familiar) respecto al Insignia saliente.

Gracias a esa distancia entre ejes aumentada, las plazas traseras del Insignia son amplias, muy amplias. Por primera vez en el Insignia, los asientos traseros exteriores pueden tener calefacción. No ocurre así con el maletero; los 490 litros del cinco puertas le dejan en la parte baja de la categoría, mientras que el Sports Tourer declara unos notorios 560 l, 130 más que su predecesor (y su apertura y cierre es gestual, pasando el pie por debajo del paragolpes trasero).

Por lo demás, el habitáculo ha evolucionado hacia un diseño minimalista, con una consola central organizada en cuatro niveles, menos botones y coronada por una pantalla táctil de 9 pulgadas en los acabados superiores (7“ de serie). Se estrena también un Head-Up Display que proyecta directamente la información en el parabrisas, y no en una lámina como sucede en algunos rivales.

Opel aprovecha el cambio de modelo para implementar, y mejorar, los equipamientos estrenados hace poco más de un año por su best seller Opel Astra. Destacan el sistema de iluminación adaptativa IntelliLux, ahora con 32 segmentos LED, 9 patrones de iluminación (incluido el de luces largas) y 400 metros de alcance; y el sistema de asistencia en línea Opel OnStar con funciones ampliadas como la reserva de hotel y búsqueda de aparcamiento.

Al igual que la competencia, los nuevos Insignia incorporan la habitual batería de asistentes relacionados con la conducción: cámara de visión 360 grados, control de crucero adaptativo con frenado automático de emergencia, corrector automático de la dirección para mantenerse en el carril de la marcha o alerta de tráfico transversal trasero.

Mecánicamente, la gama Insignia 2017 estrena un motor turbo de gasolina de 1.5 litros con dos evoluciones de potencia, de 140 o 165 CV, quedando el 2.0 turbo de 260 CV y 400 Nm de par como la opción más prestacional. En diésel, las posibilidades son el 1.6 de 110 CV y 136 CV y el 2.0 de 170, que declaran un consumo desde 4 litros a los cien kilómetros en ciclo homologado.

Por último, los Opel Insignia Grand Sport y Sports Tourer montan una nueva transmisión automática por convertidor de par y ocho velocidades. Optimizada frente a la fricción y suave en las transiciones, queda reservada para los motores más potentes, el diésel de 170 y el gasolina de 260.

El Insignia Grand Sport tiene un precio base de 25.700 euros, 1.000 euros más si se apuesta por la declinación familiar Sports Tourer.