Comunidades iberoamericana, francófona, anglófona y portuguesa unen fuerzas

Por primera vez en su historia, las cuatro organizaciones que representan a Iberoamérica, la Francofonía, la Commonwealth y la comunidad de países de habla portuguesa emitieron hoy un comunicado conjunto en el que solicitan una globalización más justa y la sustentabilidad medioambiental.

Tras una reunión celebrada hoy en Montreal (Canadá), las líderes de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), la Organización Internacional de la Francofonía (OIF), la Mancomunidad de Naciones (MN) y la Comunidad de Países de Habla Portuguesa (CPHP) firmaron un documento en favor de un “humanismo universal”.

Rebeca Grynspan (SEGIB), Michaëlle Jean (OIF), Patricia Scotland (MN) y Maria do Carmo Silveira (CPHP) señalaron que “este es un llamamiento urgente por un humanismo universal. Nuestras cuatro organizaciones pueden dar testimonio del estado del mundo”.

Las cuatro líderes dijeron haber tomado “la decisión” de unir sus voces para “realizar un llamamiento a la movilización y la acción a favor de una globalización de la economía controlada y regulada, a favor de una democracia mundial, solidaria, inclusiva, garante de los valores universales y respetuosa de la diversidad”.

La Secretaría General Iberoamericana indicó en un comunicado que “este llamado es una apuesta por una mayor cooperación entre estos destacados organismos para fortalecer la acción coordinada en torno a la agenda internacional de desarrollo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible”.

En declaraciones a Efe, Grynspan destacó que es la primera vez que las cuatro organizaciones, que representan 137 países, estados y territorios y unos 3.900 millones de habitantes, emiten un llamado conjunto y que también es la primera vez que las cuatro están dirigidas por mujeres.

Grynspan señaló que la propuesta del llamado conjunto partió de Michaëlle Jean y “todas nosotros respondimos de forma entusiasta”.

La secretaria general iberoamericana explicó que “estamos haciendo un llamado a la conciencia en la construcción de un mundo más justo, desde la visión que nos da manejar comunidades basadas en estos valores comunes”.

“Nos da una posibilidad de hacer un llamado que es político pero que no viene sólo desde la política”, añadió.

“Si todo fuera bien, no habríamos sentido la urgencia de hacerlo. Nos preocupan las indicaciones de fragmentación, de aislamiento, de proteccionismo, de un aumento de posiciones xenófobas o racistas en el mundo”, subrayó.