La OTAN alerta del riesgo de que la violencia se reanude en Ucrania

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó hoy que se están produciendo “algunos progresos” en la aplicación de los acuerdos de paz de Minsk en Ucrania, pero que existe “riesgo real” de que la violencia se reanude.

Los titulares de Exteriores aliados se reunieron hoy con su homólogo ucraniano, Pavlo Klimkin, al término de una ministerial de dos días en Bruselas.

Stoltenberg apuntó en una rueda de prensa que, entre los obstáculos que impiden la estabilización del país, está el que “los separatistas apoyados por Rusia aún no han retirado sus tropas y equipos”.

La OTAN criticó también la existencia de “grupos ilegales” en el este del territorio, todavía sin desarmar.

Stoltenberg reconoció, asimismo, que Ucrania no es capaz actualmente de llevar a cabo un control efectivo de sus fronteras.

Además, la OTAN demandó la retirada del armamento pesado, todavía presente en el terreno, intercambios de prisioneros y acceso total y sin restricciones a la labor de los observadores internacionales.

Stoltenberg señaló los acuerdos de Minks como el único camino para una salida diplomática al conflicto, y afirmó que éstos deben ser implementados íntegramente por todas las partes.

Reiteró que “continuaremos dando nuestro apoyo político y logístico a Ucrania”, y que la postura de la OTAN es una salida “pacífica y diplomática”.

“Ucrania no está sola”, aseguró, y citó como ejemplo “la ayuda que le estamos prestando para la modernización de sus capacidades cibernéticas y logísticas, así como de organización y de control”.

Estos proyectos tienen un impacto real en la suficiencia de Ucrania para defenderse y reformar sus instituciones, afirmó el secretario general.

Ucrania continúa mostrando su compromiso en la implementación de estas reformas, según Stoltenberg.

“Es fundamentalmente necesario que Ucrania siga por este camino”, concluyó.

Por su parte, el ministro de Exteriores de Ucrania, Pavlo Klimkin, acusó a Rusia y a los separatistas prorusos de desestabilizar el este del país y de impedir a los observadores internacionales y a las ONG desarrollar su labor.

“Rusia no cumple los acuerdos de Minsk ni política, ni militar ni humanitariamente”, aseguró.

En una rueda de prensa, el titular de Exteriores ucraniano hizo referencia a “los progresos hechos contra la corrupción” en su país, y de los que informó a los miembros de la OTAN.

Se mostró satisfecho por la asistencia que el país recibe de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, y que “abarca importantes y diversas áreas de cooperación”.

En todo caso, Klimkin insistió en que “hay que reformar el sector de la seguridad y la defensa en Ucrania”, para lo que está en “contacto cercano y continuo” con la OTAN.

También estima que debe reforzarse el control de la frontera ruso-ucraniana.