Suecia emite una orden de búsqueda contra una persona por preparar un atentado

Los servicios de inteligencia suecos (Säpo) informaron hoy de que han abierto una investigación preliminar y han emitido una orden de detención contra una persona sospechosa de preparar un atentado terrorista en ese país.

El nivel de alerta terrorista ha sido elevado por ese motivo en Suecia, de tres a cuatro en una escala de cinco por primera vez.

“El Säpo ha recibido una información concreta de los servicios secretos que hace que abramos una investigación preliminar”, dijo en rueda de prensa en Estocolmo el jefe de la inteligencia sueca, Anders Thornberg, que no dio detalles del sospechoso, según medios locales.

Thornberg señaló que no hay constancia de que los hechos estén relacionados con los recientes atentados de París ni con las investigaciones en Bélgica, aunque lo ocurrido en la capital francesa refuerza la necesidad de elevar la alerta terrorista.

La decisión de las autoridades suecas tampoco tiene vinculación con el anuncio hoy de la Policía danesa de elevar la alerta terrorista interna, aclaró Thornberg.

“Uno de los motivos de esta medida es dar la posibilidad a la policía de actuar para proteger a la población. Debido a nuestra actividad operativa, no podemos revelar qué acciones hemos adoptado para evitar la amenaza”, afirmó.

La inteligencia sueca considera que el fundamentalismo es la principal amenaza terrorista para este país, que ha sido señalado como objetivo por grupos islamistas.

“No hay motivo para la intranquilidad, la policía está haciendo el máximo. Si aparecen informaciones que cambian esa imagen actuaremos, pero es necesario actuar con cautela”, indicó Thornberg.

Según la edición digital del diario “Göteborgs-Posten”, el individuo que buscan las autoridades es un simpatizante del yihadista Ejército Islámico (EI) de nacionalidad iraquí que ha viajado a Suecia procedente de Alemania.

Taimour Abdulwahab, un sueco de origen iraquí, protagonizó un atentado en el centro de Estocolmo en diciembre de 2010 en el que fue el único muerto, pero que podría haber provocado una masacre, ya que se encontraba junto a unos grandes almacenes.

El terrorista hizo detonar un coche, pero no logró explosionar una bomba que fue encontrada en el interior del vehículo junto con un walkie-talkie, ni otra que llevaba en su mochila, sino sólo un cinturón bomba que tenía puesto y que le provocó la muerte.

Abdulwahab, de 28 años y que entró en contacto con círculos fundamentalistas mientras estudiaba en Luton (Inglaterra), había enviado un correo electrónico a los servicios de inteligencia suecos en los que criticaba la presencia militar de Suecia en Afganistán y las caricaturas de Mahoma del dibujante Lars Vilks.