La CIDH advierte sobre el riesgo de retroceso en derechos económicos y sociales

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) advirtió hoy que en América existe un “riesgo” de retroceder en las conquistas sociales y económicas logradas en los últimos años en el hemisferio y que permitieron a miles de ciudadanos salir de la pobreza extrema.

La voz de alerta fue lanzada durante la presentación que se realizó hoy en Buenos Aires del primer informe preliminar “Pobreza, Pobreza Extrema y Derechos Humanos en América” elaborado por la CIDH.

“Hay un escenario de riesgo. Si miramos hacia atrás, vemos muchos avances en lo que fue ganar derechos para personas que viven en pobreza, pero hoy están en riesgo de perder el ejercicio de esos derechos”, dijo Norma Colledani, encargada de los asuntos relacionados con Derechos Económicos Sociales y Culturales en la Secretaría Ejecutiva de la CIDH, al presentar el informe.

El trabajo no recoge datos estadísticos propios, sino que se basa en información aportada por el Estados, visitas de expertos a siete países del hemisferio y consultas con diversos sectores de la sociedad civil.

Con todo, el informe se hace eco de cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, que indican que el año pasado en la región 165 millones de personas eran pobres y, de ellas, 69 millones vivían en condiciones de pobreza extrema.

“Este informe podría haberse hecho hace cinco años, cuando los números eran todos positivos. Nuestra región es la región del planeta que más ha avanzado”, aseguró Paulo Vannuchi, encargado de la Unidad de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la CIDH, al presentar el informe en la sede del Instituto de Políticas Públicas en Derechos Humanos del Mercosur.

Con todo, Vannuchi advirtió que existen varias “dificultades” en la región, como la aprobación de leyes laborales que incentivan la informalidad, problemas en el sistema de la seguridad social y toda una “agenda de ajustes macroeconómicos”, con recortes en los gastos sociales.

En este sentido, Paulo Abrão, secretario ejecutivo de la CIDH, sostuvo que este informe es “fruto” del desarrollo en los últimos años de una agenda en la región de “políticas para superar la desigualdad”, pero apuntó que el documento llega en un momento en que se vive “tal vez una retracción de ese círculo de políticas gubernamentales” de afirmación de esa agenda.

El proceso para la elaboración de este informe se inició en 2015 y, según la CIDH, representa una primera oportunidad para que el Sistema Interamericano profundice en la problemática de la pobreza desde el enfoque de derechos humanos.

En esta versión preliminar, la CIDH observa “con preocupación que la persistente situación de pobreza y pobreza extrema se traducen en graves obstáculos para el goce efectivo de sus derechos humanos, tanto de los derechos económicos, sociales y culturales, como de los derechos civiles y políticos”.

Con vistas a la elaboración de un informe definitivo durante el primer semestre de 2017, la CIDH recibirá hasta el 31 de enero próximo comentarios hechos por los Estados y organizaciones de la sociedad civil.

“Será un informe que va ayudar a la CIDH en orientar a las decisiones de su sistema de casos y también a hacer un monitoreo de los derechos humanos en la región y, fundamentalmente, permitir que se pueda discutir un conjunto de temas que hasta ahora no habían sido tratado y que pasan por las garantías mínimas par una vida con dignidad y cuáles son las política sociales necesarias para garantizar esa vida digna”, dijo Abrão a Efe.

Para el director ejecutivo de la CIDH, la “situación de rotunda crisis económica” a nivel global “impacta en la capacidad de los Estados para ejecutar políticas publicas dirigidas a la atención de las necesidad básicas de sus ciudadanos”.

“El establecimiento de recomendaciones y estándares en materia de derechos económicos, sociales y culturales permitirá apuntar en el futuro a una agenda que es el resultado de una conquista histórica acumulada en los últimos años, que estuvieron bien caracterizados en la región como años de políticas muy importantes par la superación de la desigualdad”, señaló.