Congreso de Brasil se ilumina para pedir fin de violencia contra las mujeres

El Congreso Nacional de Brasil se iluminó hoy de naranja para pedir el fin de la violencia contra las mujeres, una lacra que ha aumentado de manera notable en el país suramericano en los dos últimos años, de acuerdo con encuestas.

El Poder Legislativo se sumó de esta forma al Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se celebra mañana sábado con actividades programadas por organizaciones internacionales y movimientos sociales de todo el mundo.

Al Congreso brasileño se le unirá este sábado el Cristo Redentor de Río de Janeiro, que también será iluminado de naranja como parte de una campaña de la ONU que se extenderá hasta el 10 de diciembre para luchar y concienciar sobre este flagelo que aterroriza a las sociedades contemporáneas.

En Brasil, el número de mujeres que declararon haber sido víctimas de algún tipo de violencia saltó del 18 % en 2015 al 29 % registrado este año, según una encuesta realizada por DataSenado.

También hubo un crecimiento de aquellas que admitieron conocer alguna mujer que ya sufrió violencia machista o familiar, pasando del 56 % de hace dos años al 71 % en la actualidad.

Los resultados de la encuesta, para cuya elaboración se entrevistaron a 1.116 brasileñas, muestran que en un 74 % de los casos los agresores eran hombres que tienen o tuvieron algún tipo de relación afectiva con la víctima.

En este sentido, el 41 % de los agresores fueron identificados como el esposo o el novio, mientras que el 33 % restante las víctimas reconoció que se trataba del exmarido o de antiguas parejas.

En Brasil cada dos minutos cinco mujeres sufren violencia física, según datos oficiales de la Secretaria Especial de Políticas para las Mujeres, que señala además que entre 1980 y 2013 fueron cometidos en el país 106.093 feminicidios.