El arzobispo de Oviedo vuelve a utilizar la homilía para atacar al Gobierno y pedir el adelanto electoral

El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, lo ha vuelto a hacer. En su homilía de ayer, domingo, volvió a criticar al Gobierno central y se adentró en el tema político para pedir que “se dé la palabra al pueblo para que exprese con libertad lo que piensa y lo que quiere en unas elecciones democráticas en España”, donde ha afirmado que las “prácticas corruptas” no son “anécdotas aisladas”.

En la homilía pronunciada en la Catedral de Oviedo, con motivo de la festividad del Corpus Christi, ante la presencia de una amplia representación de la corporación del Ayuntamiento de la capital asturiana, se ha referido al ascenso a primera división logrado por el equipo de fútbol del Real Oviedo, que convirtió la ciudad en toda una fiesta como una “especie de tregua” en el camino de la actualidad que, según dijo, está resultando “mucho menos festivo”.

Las “mentiras narcisistas”

Las últimas noticias provenientes del momento político que vive el país, aseguró Sanz Montes que pueden generar “cierta fatiga y molestia” así como una “profunda decepción”.

“Ante mentiras narcisistas, diversas corrupciones, robos de cuello blanco de personas que se sientan en asientos con iniciales, diversiones inmorales que todos pagamos, el anhelo de un sillón y una alfombra y toda una serie de prácticas corruptas”, ha afirmado que “no son anécdotas aisladas sino fallas sistémicas”.

Para el arzobispo de Oviedo, “desafortunadamente oscurecen y traicionan la noble dedicación de quienes se dedican a la política y al gobierno”.

Reclama un “desbloqueo de las instituciones”

En su discurso ha reclamado un “desbloqueo de las instituciones” y “sin más amaño torticero y sin más prórroga tramposa, dar la palabra al pueblo para que exprese con libertad lo que piensa y lo que quiere en unas elecciones democráticas, sin entorpecer la labor de investigación que están llevando a cabo los jueces y los distintos cauces de policías judiciales”.

“Por el bien de la sociedad, de la convivencia y de una serena democracia”, ha abundado que “urge pasar página cuanto antes y cortar la hemorragia de tantos sobresaltos en esta deriva fallida”.

Ante estas noticias que “diariamente asedian con su triste matraca”, el arzobispo considera un “paréntesis festivo” la celebración del Corpus Christi.