Los principales accionistas de Lancelot Televisión han pasado ya por los calabozos de la Guardia Civil o, en la misma calidad de imputados, por el despacho del juez César Romero Pamparacuatro. Porque además de Juan Francisco Rosa, figuran en la operación Unión y su pieza separada de la operación Jable Demetrio Rodríguez Robayna (Lanzagrava) y Rafael Lasso, que de momento sólo ha tenido que declarar en el proceso abierto por Instrucción 2 por el asunto de las licencias ilegales de Yaiza. Pero no hay que perder de vista otros dos grupos empresariales que participan en Lancelot Televisión, Hormiconsa, de Miguel Morales, y supermercados Marcial, de los hermanos Francisco y Nemesio Viera, propietarios junto al Ayuntamiento de Arrecife de un famoso parking, el Islas Canarias, cuya licencia resultó anulada por el TSJC. Las tribulaciones que produjeron esa anulación llevaron a Ubaldo Becerra, uno de los primeros detenidos, a intentar entablar contacto con magistrados de la Sala de lo Contencioso-Administrativo para ver cómo arreglar el entuerto. Morales y los Viera son, a su vez, propietarios del Arrecife Gran Hotel, desde donde emite Lancelot TV.