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El Día del Libro desata la polémica entre autores

El escritor palmero Luis León Barreto ha encendido la llama de la discordia en vísperas de la celebración del Día del Libro a raíz de una entrada en su blog titulada, El Cabildo “ningunea” a los escritores que no son afines.

En su escrito, Barreto acusa a los gestores del Cabildo de Gran Canaria de contar para los eventos sólo con autores “afines” a ellos y “ningunear” a aquellos que no lo son.

Este año los responsables de Cultura del Cabildo de Gran Canaria se han dejado llevar por el propósito de ninguneo de los convocantes de los actos del Día del Libro. De este modo, junto a la Librería del Cabildo de la calle Cano se ha organizado una firma de ejemplares y una lectura de poemas con apoyo de música clásica. Pero desde un principio la convocatoria ya vino ”cerrada“: los participantes iban a ser Alexis Ravelo, Carlos Alvarez, Santiago Gil, Berbel, María Jesús Alvarado.”

Además de citar con nombres y apellidos a los autores que sí han sido invitados a participar en actos organizados por la institución grancanaria, Barreto afirma que existe una guerra abierta entre los escritores canarios, “los escritores de aquí nos odiamos de manera visceral porque las antiguas ofensas reales o imaginarias jamás se perdonan”.

Las reacciones no se han hecho esperar, horas después de publicarse la entrada en el blog algunos de los escritores citados expresaban su malestar a modo de comentario en el blog del escritor e incluso algunos ofrecieron cederle su puesto a Luis León Barreto en la firma de la Librería del Cabildo este martes.

Santiago Gil expuso , “?no comparto ese escenario siciliano que cuentas. Unas veces te llaman de un sitio y otras no te llaman. Y nunca pasa nada si tú no quieres que pase. Obras son amores, y lo demás, francamente, carece de importancia ( en cien años estaremos todos criando malvas)”María Jesús Alvarado, “Quien me conoce sabe de mi seriedad personal y de mi compromiso social como escritora y editora. Lo demás no merece la pena ni rebatirlo, es patético”

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Carlos Álvarez recurrió al sentido del humor para contestar a Barreto, “Entre los escritores tengo algunos amigos y bastantes conocidos con los que mantengo una grata relación más o menos frecuente. Me he tomado la molestia de llamar a muchos de ellos para saber si me odian y una de dos, o son todos una pandilla de hipócritas y mentirosos, o estás completamente equivocado. Creo esto último y lo lamento. No creas que ese odio del que hablas es recíproco. También les he preguntado si te odiaban y si pretendían ningunearte y me han asegurado que tampoco.

María Jesús Alvarado contestaba así, “...quien me conoce sabe de mi seriedad personal y de mi compromiso social como escritora y editora. Lo demás no merece la pena ni rebatirlo, es patético”.

Incluso, uno de los responsables de la librería del Cabildo, Cristian J. Millares, respondió al escritor en su blog, “...mi trato con todos los autores canarios a lo largo del tiempo ha sido siempre cordial y correcto, no queriendo entrar en polémicas ni rifirafes que de eso sé bastante por tradición familiar, y menos con personas como tú, a las que aprecio y estimo de siempre”.

Alexis Ravelo fue más allá y le dedicó a Barreto un escrito en su blog titulado Gallina que canta, gallina que pone en el que confesaba sentirse sorprendido ante las palabras de Barreto, “habla de sectas, de elegidos, de cainismo y de no sé qué problema que tuvo con Luz Caballero. Personalmente, creo que Luis se equivoca”.

El escritor grancanario explica que lo que él observa es todo lo contrario “un trato cordial y bastante generoso” entre autores. “Nos alegramos de los éxitos ajenos e incluso, si podemos, contribuimos a ellos. Apoyamos, siempre que podemos, a los que van empezando y respetamos muchísimo el trabajo de los demás. Por mi parte, desde estas y otras tribunas, hablo siempre que puedo de libros canarios y hablo bien de ellos si se lo merecen”.

Ravelo añade, “Es más, este exabrupto suyo (y otros recientes) me recuerdan a aquellas malicias infantiles, cuando a alguien se le escapaba un gas en la fila y, para ahuyentar sospechas, procedía a quejarse del mal olor. En esos casos, el resto de la clase ponía en evidencia su argucia con un sencillo y eficaz estribillo: ”Gallina que canta, gallina que pone“. Porque la verdad es que entre mis compañeros de generación y entre otros autores mayores (los antes mencionados y muchos otros más) no observo esas luchas cainitas, muy características, eso sí, de la época en que él estaba en la cima”.

Con este panorama tan revuelto, Canarias celebrará este martes el Día del Libro.

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