El Gobierno canario reconoce que las cartas de Visocan a los inquilinos de Añaza “no son de recibo”
El consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez, ha reconocido que las cartas enviadas por la empresa pública de vivienda Visocan a los vecinos de las llamadas 358 viviendas de Añaza, en Santa Cruz de Tenerife, “no son de recibo” y son “absolutamente desagradables”, por lo que ha dado instrucciones para que se hagan los cambios necesarios.
La situación fue denunciada en el pleno del Parlamento por la diputada del PSOE Patricia Hernández, quien relató el dolor e incertidumbre que sufren las familias que viven en esas viviendas públicas de Añaza por las cartas que reciben de Visocan en las que se les dan unos meses para ponerse al día de sus deudas y que “si no lo hacen, que se vayan”.
A los inquilinos se les dice que les fraccionan la deuda en unas cuantías “inasumibles para personas que cobran 1,5 veces el IPREM” y recordó al consejero que hace dos años ya se había comprometido a regularizar su situación, lo cual “no ha sucedido”.
“Usted se comprometió a que aquellas personas que llevaran más de una década viviendo en esa situación, sin título habilitante, tendrían un análisis de su situación para regularizarla, pero nada de esto ha sucedido”, insistió la diputada del PSOE.
“Hay gente que está pidiendo un préstamo” para hacer frente a esa deuda y se lo deniegan, “y mientras usted no analiza la carga de lo que pueden pagar, hace oídos sordos”, denunció Patricia Hernández.
Pablo Rodríguez admitió que “las cartas no son de recibo” y defendió que la empresa tiene que “mejorar la comunicación con los vecinos y no hacerla a través de cartas que pueden ser absolutamente desagradables”.
“Hemos dado instrucciones para que se hagan los cambios necesarios”, aseguró, y apuntó que también se mejorará la coordinación con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.
Pablo Rodríguez respondió que la situación en las 358 viviendas no es homogénea y hay “una casuística inmensa entre quienes viven en esas viviendas públicas gestionadas por Visocan”.
La mayoría de las situaciones se han regularizado gracias al trabajo de la empresa Visocan y al compromiso del vecindario, afirmó el consejero.
Destacó también que en este año se han destinado 600.000 euros en “dignificar las viviendas” y otros 130.000 euros a través de una ONG para el acompañamiento social.
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