Las listas de espera alertan a Saavedra

El Diputado del Común, Jerónimo Saavedra, no ha descartado en el Parlamento que durante este año la institución que preside elabore, pese a la austeridad presupuestaria, “un informe extraordinario sobre la Sanidad” en las Islas, pues tampoco se explica “el hecho de que el número de quejas (75) no sea acorde a la realidad de la mala gestión que reflejan las abultadas las listas de espera”.

De esta manera, aunque en esta ocasión a preguntas de las diputadas Carmen Hernández (NC) y Flora Marrero (CC), Saavedra ha vuelto a poner el foco en el departamento que dirige Brígida Mendoza, cuya gestión ha sido objeto de crítica en el informe del Diputado de Común del año 2012.

Y es que el informe llega a calificar como “realidad insufrible para la ciudadanía” las abultadas listas de espera sanitarias, con especial mención, por su gravedad, las referidas a enfermos de obesidad mórbida, un dato que también resaltó la representante de NC en el Grupo Mixto.

Y es que si alguien pensó hace dos años que Saavedra iba a usar el Diputado del Común como un cómodo retiro era desconocer como se las gasta el primer presidente autonómico de Canarias, ex ministro y ex alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, cuya característica ha sido siempre decir lo que piensa sin pararse a observar si perjudicaba a propios o extraños.

Y si lo hizo cuando era el máximo dirigente de los socialistas canarios, más aún cuando ya está de vuelta de todo. Por eso critica la gestión en el Gobierno tanto de CC (Sanidad y Asuntos Sociales) como la del PSC (la posible inconstitucionalidad decretada por Hernández Spínola al recorte del 20% de empleo y sueldo a 3.300 funcionarios) o la incongruencia en los planteamientos economicistas y estadísticos que usa el PP para pedir la disolución del Diputado de Común.

Más de 1.500 quejas

Y lo hace con conocimiento de causa. El que otorgan las 1.586 quejas presentadas por la ciudadanía canaria en el año 2012.

En sede parlamentaria, ante los diputados de la Comisión de Gobernación, Saavedra ha repetido lo que lleva meses diciendo públicamente en los medios de comunicación: hay que “agilizar” tanto la declaración de la gravedad de la dependencia como la definición de la prestación (“incluso se llega al fallecimiento del peticionario sin que haya sido reconocido como dependiente”), así como la gestión de la Prestación Canaria de Inserción o la actualización de los protocolos municipales de funcionamiento en materia de absentismo escolar para que la Consejería de Educación los coordine.

Y, ante los ataques del diputado conservador Emilio Moreno por la obsolescencia de la Institución, Saavedra la ha defendido como “un instrumento de participación y renovación de esa democracia representativa, para que se fortalezca y perfeccione, que ahora está en crisis”.

Y es que Moreno, para pedir la disolución del Diputado del Común, echó mano de criterios estadísticos y economicistas: “la Institución ha sido usada por el 0,7% de los canarios”, lo que, dado su presupuesto, significa que “cada queja ha costado 1.800 euros” al erario público.

Moreno recordó que se trata de una institución que no existe en otras comunidades, como Castilla-La Mancha, Madrid y Murcia “y no pasa nada”, y propuso que las quejas sean tramitadas por los 60 diputados regionales.

“Tienen que tener el mismo mensaje para ser coherentes ¿por qué mantienen a la Defensora del Pueblo y a las instituciones análogas en Galicia y Castilla-León?”, contestó Saavedra.

Y, frente a las críticas de obsolescencia y distanciamiento, Saavedra fue contundente: “el Diputado del Común es fundamental para seguir profundizando en la participación ciudadana, igual que las quejas en las plazas, en twitter y en las encuestas”.

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