El PP acusa a Clavijo de usar el IGTE como “una tómbola” que reparte con “opacidad y confusión”
La imagen que el Grupo Popular tiene de la polémica política sobre el reparto del Impuesto General sobre el Tráfico de Empresas (IGTE) ha quedado clara en el pleno parlamentario:“lo tiene en su mochila” el presidente Fernando Clavijo, y con ella “al hombro”, recorre los municipios“ prometidendo como si fuese una tómbola y repartiendo con absoluta opacidad y confusión, sin transparencia”.
Así lo ha asegurado el presidente del Grupo Popular, Asier Antona, que acusó al Ejecutivo de “haber enredado” lo que supuso una buena noticia, como era recuperar el dinero del extinto IGTE, debido a la absoluta falta de criterio de Clavijo, “que se echó en los brazos de Casimiro Curbelo cuando propuso un reparto basado en la triple paridad” y que ha ido cambiando de idea en función de los acontecimientos, “añadiendo luego un factor de corrección del 10 por ciento en función de los empleados” y luego apostar por un cambio de modelo productivo “que ni siquiera se sabe qué diagnóstico tiene y cual es”.
Un enredo que ha contribuido a que “ninguno de los diputados de esta Cámara”, salvo Curbelo, “conozca cuales son los criterios de distribución”, por lo que pidió al líder del Grupo Mixto (ASG) “que me lo explique en los pasillos” del Parlamento.
“Ni siquiera lo han consensuado con sus socios de Gobierno, pues Patricia levantó el dedo pidiendo que su departamento pudiera participar en el reparto y le dijeron: usted se calla. Y se calló, la pobre, y lo digo con todo el respeto a la vicepresidenta del Gobierno”, afirmó desde la tribuna.
Exceso de información
“No hay reparto, hay proyectos, que pondrán encima de la mesa todas las corporaciones locales” contestó la consejera de Hacienda, Rosa Dávila a Antona.
La titular de las arcas autonómicas ha acusado al PP de “mantener el enredo” pese a que el Gobierno “ha puesto transparencia”. “De lo que se nos puede acusar es de exceso de información”, ha remachado.
Así, Dávila ha insistido en que el Ejecutivo está preparando el borrador, en diálogo con cabildos, ayuntamientos y sectores económicos y sociales, que regirá la distribución de los recursos extraordinarios que suponen los 1.600 millones de euros en los próximos 10 años.
Así, ha recordado que habrá 80 millones de euros para proyectos de inversión en economía digital, 1.200 millones se destinarán a infraestructuras productivas, y 320 millones irán a políticas activas de empleo.
“No ha sido el Gobierno quien ha embrollado, pues el propio presidente quiso desde el principio que ese dinero fuese directamente a los ciudadanos a través de las corporaciones locales”, insistió Dávila.
Unas corporaciones que remitirán los proyectos al Gobierno para que la Consejería de Economía los evalúe, que con posterioridad serán analizados en el comité asesor en el que participan la Fecai y la Fecam para que Hacienda libre las partidas necesarias.
“Este Gobierno mantiene la mano tendida a todos los alcaldes y alcaldesas, de todos los partidos, para que participen en la distribución del IGTE”, afirmó Dávila, pues el objetivo es “un cambio modelo económico basado en reforzar la economía en aquellos sectores que están más débiles” para que puedan generar empleo.
“Me he enredado más con sus explicaciones”, concluyó Antona, pues “ya se han repartido el pastel antes de esa evaluación que usted anuncia”.
“Al final, vamos a parecer los malos los que nos oponemos ha este enredo”, remachó el presidente del Grupo Popular.