Nuevas asociaciones vecinales se suman a la manifestación contra los vertidos que inundan la costa de Gran Canaria

Las asociaciones de vecinos Meclasa, de los barrios de Melenara, Clavellinas y Salinetas, y Vecinos y Amigos del Cristo de Ojos de Garza, se han unido a la convocatoria hecha desde diferentes asociaciones de los barrios costeros de Telde y del colectivo ecologista Turcón, entre otros grupos ciudadanos, en protesta contra el grave episodio de vertidos que desde hace casi un mes afecta a diferentes playas de varios municipios de la costa este de Gran Canaria.

La manifestación será este domingo, 16 de noviembre, en Melenara, “en defensa de nuestro mar y contra la contaminación que amenaza la salud de nuestras comunidades y el futuro de nuestras costas”, exponen estas organizaciones vecinales.

“Nuestra playa de Ojos de Garza también se encuentra afectada por esta problemática, y la preocupación de nuestros vecinos y vecinas es cada vez mayor. La contaminación pone en riesgo el bienestar de nuestro entorno natural, la calidad de vida de quienes disfrutamos de la costa y el futuro de las generaciones venideras”, denuncia la organización vecinal.  

“No podemos permanecer en silencio mientras nuestro litoral se degrada. Invitamos a todos los vecinos y vecinas de Ojos de Garza, y de Gran Canaria en general, a participar en esta manifestación pacífica y necesaria. La unión de los vecinos es la mejor herramienta para exigir medidas urgentes de limpieza y protección de nuestras playas”, añade.  

Desde Meclasa subrayan que este es un asunto que “debe abordarse con respeto institucional, diálogo y sensibilidad, siempre priorizando el bienestar del medio natural y de quienes dependen de él”.

Por ello, ambas organizaciones hacen un llamamiento a la ciudadanía para que se sume a esta jornada de movilización, “convencidos de que solo con unidad y compromiso lograremos un mar limpio, libre de contaminación y de prácticas que lo dañen”.

Este mismo viernes, otros colectivos ecologistas encabezados por Turcón reclamaron públicamente la instalación “inmediata” de medios anticontaminación en el litoral por el vertido que afecta a sus playas desde la pasada semana y que, según ellos, proceden de las jaulas de acuicultura instaladas frente a la costa.

Concretamente, han pedido el despliegue de barreras anticontaminación, skimmers y elementos absorbentes, que, según estas organizaciones, “son recursos con los que cuentan las administraciones para hacer frente a este episodio de contaminación marina”, y que se instalen en el entorno de las jaulas de cultivo de peces fondeadas en su costa.

Estas organizaciones exponen que en las últimas semanas, y especialmente desde el 14 de octubre, con el cambio de régimen de vientos desde el este, el litoral de Telde sufre una contaminación “inaceptable procedente de las jaulas de cultivo de peces”, que ha impedido el uso saludable de sus playas y ha afectado también a los municipios de Ingenio, Agüimes, Santa Lucía, San Bartolomé de Tirajana y Mogán.

Turcón aseguró haber recibido testimonios de bañistas que habían sufrido en los últimos días infecciones cutáneas, otitis, gastroenteritis y otros cuadros irritativos tras estar en contacton con el agua de distintas playas de Telde. ''En Telde, echamos de menos la limpieza de residuos de la arena y de las rocas. Otros ayuntamientos ya lo hacen con sus respectivas empresas de limpieza'', señaló el colectivo.

También Nueva Canarias ha mostrado su apoyo a la protesta ciudadana y ha apuntado que “contrasta” la preocupación vecinal por este episodio de contaminación “con la pasividad e inacción del alcalde [de Telde] Juan Antonio Peña y su gobierno, que ha guardado un preocupante silencio ante esta situación anómala en las playas, sin dar la cara ante los vecinos, sin informar de forma clara a la población, sin reunirse con los colectivos vecinales ni con las entidades sociales implicadas y sin dar respuesta a las denuncias vecinales objetivas, elevadas y significativas”.

La Fiscalía investiga lo ocurrido

Esta misma semana, la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas abrió diligencias de investigación por este vertido tras recibir la comunicación de la empresa concesionaria de la explotación de acuicultura de la muerte masiva de peces en el litoral de Telde.

Además, acordó de manera inmediata encomendar al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil la práctica de las diligencias que fuesen necesarias para la averiguación del origen, causa y autoría del vertido.

Así mismo, pidió a los ayuntamientos afectados para que informasen de la situación de las costas donde se habían detectado los vertidos, medidas adoptadas para su contención, así como de toda la información disponible sobre las muestras de agua tomadas durante esos días.

Origen del vertido

El origen de este importante vertido se está aún investigando, pero apareció en la costa desde mediados de octubre y se fue extendiendo por el litoral de Gran Canaria. El 6 de noviembre, la Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias declaró la situación de alerta por un ''episodio de contaminación marina'', ante la presencia de un vertido “de materia orgánica en descomposición” ''desde instalaciones situadas en el mar''.

La alerta afecta desde entonces a seis municipios (Telde, Agüimes, Ingenio, Santa Lucía de Tirajana, San Bartolomé de Tirajana y Mogán) y diez playas fueron cerradas: tres en Telde (Salinetas, Melenara y Aguadulce) y siete en Mogán (playa de Mogán, playa del Cura, Taurito, Puerto Rico, Anfi, Patalavaca y Marañuelas). Algunas de estas ya han reabierto, aunque con bandera amarilla.

Gas sulfhídrico y jaulas marinas

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, dijo este 10 de noviembre que ''en teoría'' lo que ha provocado la muerte de los peces en el litoral este de la isla ha sido un vertido ilegal de gas sulfídrico. Aun así, Morales señaló que todavía se está pendiente de los análisis de las aguas que han resultado contaminadas y aseguró que ''del origen y quién lo produjo aún no se sabe nada''.

Ya en octubre, el colectivo ecologista Turcón exigió al Gobierno de Canarias que revisara el informe de impacto ambiental del proyecto de cultivo de lubina localizado frente a las costas de Telde y explotado por la empresa Aquanaria. ''Desde hace más de dos décadas, los vecinos y vecinas del litoral de Telde sufren episodios recurrentes de contaminación marina: acumulación de bolas de pienso, restos grasos y películas aceitosas que ensucian las aguas, generan malos olores y deterioran la calidad ambiental de las playas'', advirtieron.