La llegada de inmigrantes a Canarias en pateras y cayucos se triplica en los primeros ocho meses del año

Medio millar de inmigrantes llegaron en pateras o cayucos a las costas de Canarias (o fueron rescatados en sus zonas de influencia) hasta el final de agosto, más del triple que en los mismos ocho meses de 2018, según datos del Ministerio de Interior.

En concreto, de enero a agosto llegaron a Canarias por mar 496 inmigrantes, un 273 % más que un año antes, a bordo de 19 embarcaciones, un 73 % más que entre enero y julio de 2017.

El numero de inmigrantes que ha llegado a España por mar hasta el 31 de agosto ha sido de 28.620, un 163 % más de los que arribaron a las costas españolas un año antes, y lo hicieron a bordo de 1.168 embarcaciones.

Según datos del Ministerio de Interior correspondientes al periodo que abarca desde el 1 de enero hasta el 31 de agosto, por las costas peninsulares y Baleares ha llegado la mayor parte de los inmigrantes, 27.352 en 1.107 embarcaciones, lo que se traduce en aumentos de 163 % y 90 %, respectivamente.

El resto, 1.268 personas, lo hizo por las costas de Melilla, Canarias y Ceuta.

Así, a las costas melillenses llegaron 509 personas en 20 embarcaciones, con aumentos del 82 % de inmigrantes y el 53 % de embarcaciones.

Y a Ceuta lo hicieron 263 personas, un 255 % más, en 22 embarcaciones, un 70 % más que un año antes.

Si a los inmigrantes llegados en pateras se le suman los que lo hicieron por vía terrestre, en total han entrado de forma irregular en España 33.195 personas, un 120 % más de los 15.114 que lo hicieron entre enero y agosto de 2017.

De las que entraron por tierra, 3.092 lo hicieron por Melilla (un 22 % más) y 1.483 por Ceuta, la única cifra que ha descendido -casi un 13 %.

En las cifras facilitadas por Interior no están contabilizadas las cerca de 600 personas rescatadas en la costa andaluza en las últimas 48 horas.

Además, la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), ha recordado que, en los primeros siete meses del año, 318 personas migrantes murieron o desaparecieron en el mar mientras trataban de llegar a España, una cifra que casi triplica a las 113 muertes registradas en el mismo periodo de 2017.