Tres testigos declaran en el proceso a Benítez de Lugo
El hermano Jesús y dos médicos forenses han sido citados a declarar para este lunes ante el Tribunal Supremo en la causa en la que se investiga al senador del Partido Popular por Gran Canaria Borja Benítez de Lugo por una presunta agresión a su exmujer ocurrida el 2 de agosto de 2012.
El magistrado Antonio del Moral preguntará al religioso sobre los detalles del suceso después de que hubiera acompañado a su vecino, Benítez de Lugo, al servicio de urgencias de una clínica canaria tras encontrarle en la calle siendo atendido por una tercera persona y con evidentes “problemas respiratorios”.
Dos médicos forenses también comparecerán ante el magistrado instructor para dar cuenta de los informes, a los que ha tenido acceso Europa Press, en los que concluían que las lesiones manifestadas por su ex mujer tenían carácter leve y descartaban la existencia de puñetazos o empujones, contradiciendo la versión de la denunciante.
El conocido en Canarias como hermano Jesús, fundador de la Obra Social de Acogida y Desarrollo, acudió a dependencias policiales para declarar que ese día se encontraba paseando cuando se topó con Elsa Khaeler quien le dijo: “Estoy denunciando a tu amigo Borja porque es un mal padre”. Acto seguido, dedicó una serie de improperios contra él y contra su ex marido.
Instantes después, localizó a Benítez de Lugo sentado en el escalón de uno de los edificios con “evidentes síntomas de cansancio y problemas respiratorios”. Cuando le preguntó por lo sucedido, le respondió que había tenido “una trifulca con su ex mujer que le había alterado notablemente”.
Según figura en la declaración policial, fue entonces cuando el religioso decidió acompañarle al servicio de urgencias al conocer los “graves problemas cardiacos” que padecía.
Lesiones de carácter “leves”
El Tribunal Supremo también interrogará al autor del informe médico forense que encargó para evaluar si las lesiones y los partes de sanidad aportados por la denunciante eran compatibles con su declaración.
La Clínica Médico Forense emitió un informe en el que se desprendía de la equimosis y el enrojecimiento de la piel que había existido “movimiento” entre agresor y víctima, aunque no apreciaba “lesiones típicas de mecanismo contusivo directo, como puede ser un puñetazo o un codazo”.
Los peritos concluyeron que las lesiones eran de carácter leve y correspondían “en parte” a lo relatado por Khaeler, que “algunas” no fueron conforme al mecanismo de autolesión y que desconocían si la denunciante había sufrido daño psíquico.
Heridas no características de violencia de género
El magistrado instructor también tendrá oportunidad de preguntar sobre el informe pericial que el senador 'popular' aportó para su defensa en el que se recogía que las heridas de Khaeler no eran características de un episodio de violencia de género y que incluso algunas eran compatibles con el “mecanismo de autolesión”.
Las conclusiones del especialista Enrique Fernández pusieron de manifiesto la “clara” contradicción entre lo manifestado por la denunciante en comisaría y después en sede judicial, con el reportaje fotográfico realizado por la Policía sobre sus heridas. “Las heridas tienen un mecanismo de producción compatible con arañazos pero nunca con golpes, empujones o codazos”, sostenía el especialista en psiquiatría.
El incidente que tuvo lugar el pasado agosto dio lugar a las denuncias cruzadas del parlamentario 'popular' y su exmujer. Mientras el Supremo investiga a Benítez de Lugo por su condición de aforado, un juzgado de Las Palmas de Gran Canaria tramita la denuncia que éste formuló contra su Khaeler por un delito de allanamiento de morada y denuncia falsa.
El senador mantiene que abrió la puerta de su domicilio pensando que su hija se había olvidado algo. Para su sorpresa, su exmujer acompañada por sus padres y su hermana entró en su vivienda donde le arrinconaron e impidieron que saliera de casa. Tras conseguir zafarse y salir corriendo a la calle, Benítez de Lugo fue asistido en una clínica por ansiedad y dolor torácico.