La Fiscalía de Santa Cruz de Tenerife pide 19 años para un hombre acusado de agredir sexualmente a su pareja tras dejarla inconsciente

La Audiencia de Santa Cruz de Tenerife juzgará la próxima semana a un hombre acusado de agredir sexualmente a su pareja, de la que tenía en vigor una orden de alejamiento, mientras estaba inconsciente tras golpearla varias veces.

La Fiscalía pide penas que suman los 19 años de cárcel por los delitos de quebrantamiento de orden de alejamiento, lesiones y agresión sexual, así como indemnización a la víctima en la cantidad de 3.700 euros.

Según se recoge en el escrito de calificación, el encausado estaba siendo procesado por posibles delitos de malos tratos y amenazas a su pareja, por lo que se le prohibió acercarse a ella a menos de medio kilómetro y tampoco podía comunicarse con ella.

Pese a estas medidas cautelares ambos se seguían viendo de forma intermitente y de hecho en uno de los días que ella estaba en la vivienda de él en La Laguna fue cuando se produjeron los hechos.

Durante una discusión, el hombre le propinó un fuerte golpe en la cabeza a la mujer con un palo de cortina de madera de 135 centímetros, utilizó un cuchillo de cocina y dio diversos golpes por todo el cuerpo hasta que cayó inconsciente al suelo.

A partir de aquí el procesado la arrastró hasta el baño, momentos en los que la víctima estuvo totalmente desprotegida para repeler las agresiones continuas de las que era objeto, detalla el escrito de Fiscalía.

Tras despertarse la mujer comprobó que su expareja se había ido pero ella permanecía tumbada en el dormitorio, donde había sido agredida sexualmente mientras estaba inconsciente.

Los hechos fueron denunciados de manera que desde el Hospital Universitario de Canarias (HUC) se activó de forma inmediata el protocolo correspondiente.

La mujer presentaba diversas heridas en la cabeza, hematomas en la mano y espalda y ojo derecho entre otras, lesiones tardaron en curarse una semana y de las que en la actualidad no le quedan secuelas.

Los análisis reflejaron que la mujer había mantenido relaciones con dos hombres, uno de los cuales era su entonces pareja y en la orina se detectó presencia de alcohol, cocaína, ansiolíticos, analgésicos, antiinflamatorios y anestésico local.

En cuanto al acusado se identificó consumo del alcohol y de sustancias estupefacientes pero no se concretaron exactamente cuáles eran, sino si fueron suficientes para que no pudiera decidir si hacía lo correcto.