No pasa nada si las primeras adjudicaciones las realiza el consejo de administración que salga de la junta general de accionistas de este martes, a pesar de la ampliación de capital iniciada. Está todo perfectamente acordado y en todo caso los pequeños accionistas tendrían un consejero en breve. Por eso ahora ATI no dice nada, mantiene en el consejo a un corresponsal que informe de todo, Miguel Becerra, a la espera de la segunda parte de la cuestión: el almacenamiento del gas, donde entraría Cepsa, el protegido. El reparto, como podrán imaginar, es perfectamente equitativo, es decir, primero se reparte en Las Palmas y después se reparte en Tenerife. Todo es cuestión de paciencia. Total, más está tardando el tren y a ellos no se les ve nerviosos, ni mucho menos.