La única condición innegociable que ha puesto López Aguilar sobre la mesa es que él, ganador claro de las elecciones, presida el futuro Gobierno de Canarias. Pero, a partir de ahí, propuso a Rivero gobernar en minoría, gobernar en coalición con CC-ATI o montar un Gobierno de consenso formado por personas notables de la vida política y social de Canarias que con su aportación contribuyan a dar estabilidad, sosiego y credibilidad a las instituciones. Que sepamos, y a falta de una mayor concreción de los dos dirigentes reunidos este lunes, Paulino sólo ha rechazado la primera fórmula, la de pemitir al ganador de las elecciones gobernar en solitario. Con muchos menos diputados, veinte, los socialistas apoyaron a Adán Martín para que gobernara Canarias desde mayo de 2005 hasta la fecha. Pero qué se le va a hacer, si la ley del fonil es así de sesgada.