Lo que no suceda en el Puerto de la Cruz no pasa en ningún otro lado. Ya saben que allí la lógica y la normalidad no son virtudes que abunden en la vida municipal, con ese pedazo de alcalde que tiene y alguna fauna y flora que le rodea, tanto dentro como fuera del grupo de gobierno. Por eso llama la atención que en la última controversia pública entre ese gobierno (CC+tránsfuga) y aqella oposición (el PSC), a propósito de la política turística municipal, en un comunicado de réplica de los socialistas hayan echado un riqui-raca al concejal de turno. ¿Y eso?, se preguntarán ustedes con razón. Pues resultó que la denuncia socialista sobre el estado de las dependencias de plaza de Europa tenía su fundamento y, claro, el concejal Lorenzo Hernández optó por reconocerlo, con humildad, y hasta anunciando que se mudan de allí a la Casa de la Aduana en cuestión de semanas.