La localidad de Casasimarro, de poco más de 3.000 habitantes en la localidad de Cuenca, ha acordado solicitar la declaración de zona catastrófica al Gobierno de España por los daños provocados por el granizo en unas 1.300 hectáreas de cultivo del municipio. El alcalde, Óscar Pinar, explica que los más afectados han sido el cereal, vid, olivo y guisante. El pleno municipal aprobó este jueves la solicitud, para garantizar mayor “agilidad” en la tramitación de los seguros para los agricultores y de otro tipo de ayudas para paliar las pérdidas.
Pinar resalta que no hubo otros daños materiales en casas o zonas urbanas del pueblo. “Aquí cayó bastante agua en muy poco tiempo, unos 25 o 30 litros en unos 10, 15 minutos. Pero muy poco granizo”, explicó. Desde el Ayuntamiento dirigirán la solicitud a todos los frentes posibles: subdelegación del Gobierno en Cuenca, la delegación de Agricultura y también al Ministerio de Agricultura.
Pinar ha lamentado que no ha recibido llamadas de “ningún organismo público”. “No hemos tenido ninguna toma de contacto. Sé que ayer vino el delegado de Agricultura, pero no se dignó ni a llamar al alcalde. Fue a visitar la cooperativa y el campo afectado, pero no me llamó”, recalcó.
Se refiere a Rodrigo Fernández, delegado provincial de Cuenca de Agricultura, Ganadería y Desarrollo rural, quien ha agradecido a través de las redes sociales la aprobación de la declaración de zona catastrófica y ha explicado que cerca de un cuarto de la superficie del municipio se ha visto afectado.
La portavoz del PP en la FEMP Castilla-La Mancha, ha criticado el “menosprecio” del Gobierno regional al alcalde, y ha acusado al Ejecutivo de buscar el “interés partidista por encima de ayudar a los agricultores afectados por el granizo en la localidad.
Cantarero ha recogido la “decepción” del alcalde de Casasimarro, Óscar Pinar, que se ha mostrado “sorprendido” por la decisión del gobierno socialista de visitar su municipio “sin contar con la presencia del alcalde y sin avisar de dicha visita”, lo que tachan de “falta de lealtad institucional” y de “partidismo”. Cantarero ha pedido “sensibilidad” con los viticultores y agricultores de la zona, así como “celeridad” para las ayudas que ayuden a paliar los efectos.
“Es momento de que Page esté con los agricultores que han visto como el granizo se llevaba por delante el trabajo de todo el año”, ha insistido Cantarero, “y no de estar pendiente de que sus cargos regionales menosprecien a los alcaldes del PP”, ha concluido.
Por su parte, Paco Núñez, ha comunicado que “espera que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha esté a la altura y actúe con responsabilidad para ayudar a los agricultores de la zona”.
ASAJA advertía ya este pasado lunes de daños “catastróficos” en cultivos como el olivar, el almendro, cereal, pistacho y viñedo en varias zonas de Castilla-La Mancha. La organización agraria señala que, en las zonas mayormente afectadas, las pérdidas en cultivos no bajarán del 70%, alcanzando en muchas parcelas el 100%. De esta manera, han instado a los agricultores a contar con seguros agrarios o ampliar las pólizas contratadas.
Previsiones meteorológicas
Luis María Bañón, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), explica que el granizo ha sido “posiblemente el elemento principal” de las tormentas que se han vivido en la región durante los últimos días. “Nuestras predicciones ya apuntaban a una atmósfera favorable”, explica. Han tenido constancia de granizos de un grosor de más de dos centímetros, y también de otros mucho más pequeños pero “con una cantidad enorme”.
El fenómeno ha afectado en mayor o menor medida a todas las provincias de Castilla-La Mancha entre la tarde del pasado miércoles y el jueves. Resalta que en localidades como Yeste, Albacete, se llegó a ver una tuba -una nube con forma de embudo-, y que también se registró un pequeño tornado asociado a las tormentas en la provincia de Toledo. Esto se ha producido gracias a la “inestabilidad” en la atmósfera, donde se ha combinado aire frío y aire más templado, rico en humedad, con una distribución de vientos favorable.
Bañón advierte de que este fin de semana hay otra borrasca en la zona de Galicia, y seguirán las precipitaciones, aunque de forma más suave, con la jornada del domingo como una “de descanso”. El próximo miércoles, 14 de mayo, se espera que sea un “día de lluvias” y puede que también de tormentas, para luego “tranquilizarse” a partir del jueves. “Pero seguimos en un tiempo muy primaveral y habrá que estar atentos”, concluye.