El aniversario del incendio de Guadalajara sirve de base para las reivindicaciones de los bomberos
Las Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) finalizan los tres primeros días de huelga entre los homenajes y recuerdos del incendio que arrasó con miles de hectáreas de bosque en el municipio de Riba de Saelices y que costó la vida a nueve bomberos y dos agentes medioambientales del retén de Cogolludo. El centenar de trabajadores repartidos en las bases de Prado de los Esquiladores, en Cuenca, y la Iglesuela, en Toledo, funcionan bajo un convenio colectivo con un anexo “claramente discriminatorio” según Comisiones Obreras.
El sindicato señala que los profesionales de las BRIF son los únicos quienes no gozan de todos los beneficios del convenio colectivo, en especial en aquellas cuestiones retributivas o de compensación de días, así como pluses por peligrosidad en su trabajo. El colectivo se mantiene a la espera de las respuestas a sus peticiones. Si estas no son satisfactorias, los profesionales han anunciado que retomarán la huelga, esta vez con carácter indefinido, a partir del próximo día 27 de julio. Comisiones Obreras Castilla-La Mancha ha señalado que respalda las reivindicaciones, ya que se trata de un colectivo que “nunca ha visto reconocida su labor social o laboral desde su creación hace más de 20 años.
Asociaciones nacionales de agentes y bomberos forestales se han reunido en Guadalajara para homenajear el trabajo de sus compañeros que perdieron la vida en el incendio de Riba de Saelices hace ya diez años. Los colectivos han señalado que “en plena ola de calor y en medio del intenso trabajo que se realiza sobre los incendios” es el momento de recordar a las víctimas, “con la mirada puesta en el presente y el futuro”. Los colectivos han señalado también que tienen la “esperanza” de que una situación así no vuelva a ocurrir.
En términos políticos tanto las Cortes de Castilla-La Mancha como Podemos han recordado también la tragedia. El responsable del área de Territorio, Medioambiente y Ecología del Consejo Ciudadano de Podemos, Iñaki Blanco, ha lamentado que diez años después los colectivos tengan que pedir su dignificación, después de “maltratos a base de muchos ERE y presiones y amenazas a los trabajadores”. El representante de Podemos ha culpado al antiguo Ejecutivo del Partido Popular de dejar un cuerpo de extinción “reducido a su más mínima expresión, tanto en medios personales como materiales”.
Podemos insta así al Gobierno regional a abrir una vía entre la administración, las empresas y los sindicatos para que los trabajadores de los incendios forestales recuperen sus “derechos perdidos” y también su estabilidad laboral, El diputado David Llorente también se ha hecho eco de la lucha de los trabajadores. El PP ha enviado también su “más sincero reconocimiento” a los familiares y ha atribuido al Gobierno de María Dolores de Cospedal el haber cerrado “todas las heridas” gracias a la Ley de Caso Único, tal como señala Carlos Velázquez.
Finalmente, el Sindicato Independiente de los Bomberos Forestales ha señalado que las “reunificaciones históricas”, como la profesionalización real plena de los trabajadores, el convenio de un sector que “reconozca las peculiaridades de la profesión”, y la equiparación de sueldo acorde a las funciones de peligrosidad que realizan los trabajadores, se han convertido en “un canto de sirenas”. El colectivo ha usado al incendio de Guadalajara como un ejemplo de esta afirmación, añadiendo que la “única realidad” es que las empresas públicas que se hacen cargo de los incendios forestales, como Tragsa y Geacam, sólo han servido para “portarse como la más agresivas de las privadas y hacer caja”.
