Cambiaron las estrellas por la sostenibilidad laboral y por sumar a su comunidad con un pequeño proyecto hostelero en un pueblo de Cuenca. Con formación en el Basque Culinary Center, y tras pasar por Singapur o Costa Rica, Jésica Alfaro y Soledad López, conquenses, decidieron volver a sus orígenes, al pueblo y abrir su propio negocio, un bar de pueblo, con el objetivo de volver a dar vida a la plaza de Motilla del Palancar (Cuenca), localidad que sufre en primera persona las consecuencias de la despoblación rural.
Fue así cómo nació la Bodeguilla de Motilla, una iniciativa que ha sido reconocida durante la entrega de los Reconocimientos Somos km.0 que elDiario.es Castilla-La Mancha entregó en Toledo este jueves, ya que les fue concedida la distinción al impulso a la economía rural y la lucha contra el despoblamiento.
“Nos conocimos en San Sebastián estudiando, hemos abierto proyectos alrededor del mundo y veíamos una necesidad”, explicaba Soledad López tras recoger el reconocimiento. Y es que, después de “viajar tanto, conocer otras culturas y sus formas de entender la gastronomía”, sintieron la necesidad de interpretar esas experiencias en su zona.
“Tenemos muy claro que es un espacio para evadirse, un sitio distinto al que la gente quiera ir, porque reamente hay cabida en los pueblos, pero hay que apostar por ellos”, remata López.
Y dada la acogida que ha tenido, las fundadoras de la Bodeguilla de Motilla adelantaron que su idea es que el proyecto siga creciendo y vaya a más apostando por la formación en gastronomía: “Vamos a llevarla a los peques, a los grandes, a todo tipo de edades para trabajar la sostenibilidad, el producto y todo lo que se elabora en nuestra zona”.