Ofensiva ecologista para evitar el almacenamiento de residuos sanitarios “de máxima peligrosidad” en Albacete
Ecologistas en Acción Albacete quiere evitar que la Junta de Castilla-La Mancha apruebe la solicitud de ampliación de una planta de reciclaje de residuos ubicada en Hoya Gonzalo y que pretende, con esa ampliación, incorporar la Gestión de Residuos Biosanitarios, la Transferencia de Residuos Peligrosos y No Peligrosos y una línea de producción de Combustible Sólido Recuperado (CSR).
Alegan en contra los impactos derivados de la gestión de estos residuos “de máxima peligrosidad”. Y es que la empresa solicitante del permiso quiere poder gestionar en Hoya Gonzalo residuos biosanitarios de tipo tres (son aquellos sobre los cuales se han de observar medidas de prevención en la manipulación, la recogida, el almacenamiento, el transporte, el tratamiento y la eliminación, tanto dentro como fuera del centro generador, ya que pueden representar un riesgo para la salud laboral y pública) entre los que se encuentran, entre otros, restos anatómicos o recipientes que contengan sangre u otros líquidos biológicos.
También solicitan el tratamiento de los Aparatos Eléctricos y Electrónicos (AEE) mediante proceso de esterilización en autoclave. Son, según José Julio del Olmo, miembro de Ecologistas Albacete, una gran variedad de residuos “tóxicos y peligrosos que se gestionarían, procedentes de actividades industriales de lugares muy lejanos, y que incide en el hecho de que las zonas rurales, de baja población y envejecida, se está convirtiendo en los vertederos de las zonas industriales, que son las que deberían gestionar sus propios residuos”.
Y es que en el proyecto la empresa “no detalla la procedencia geográfica” de estos residuos por lo que sospechan, dicen, que deben tratarse de “residuos biopeligrosos procedentes de fuera de la Comunidad Autónoma”. De hecho, este miembro de Ecologistas asegura que, una vez consultada la página web de la empresa solicitante y que ya está instalada en Hoya Gonzalo, “hemos comprobado que los residuos hospitalarios que gestionan son de dos hospitales de Catalunya”. Esto además llevaría un riesgo añadido: su transporte.
Entre sus alegaciones también aseguran que la empresa no plantea verdaderas alternativas de ubicación, tal y como estipula la Ley 21/2013 de Evaluación Ambiental y la Ley 4/2007 de Evaluación Ambiental de Castilla-La Mancha.
Además creen el proyecto no detalla verdaderamente la gestión de los residuos biopeligrosos, ni su incidencia en cuanto a las posibles partículas desprendidas a la atmósfera. Se refieren a las dioxinas, compuestos químicos que proceden principalmente de las emisiones de incineradores y otras fuentes de combustión. Su formación se produce como consecuencia de procesos químicos que ocurren durante la combustión, principalmente a partir de compuestos químicos relacionados como clorobencenos, clorofenoles y policloruros de bifenilo. Debido a la elevada toxicidad de las dioxinas, se han realizado numerosos estudios sobre sus mecanismos de formación, ya que este conocimiento es de vital importancia a la hora de estudiar posibles procesos para su degradación.
Según el colectivo ecologista la zona de instalación está dentro de la IBA 182 Petrola- Almansa- Yecla. La IBA, dice José Julio del Olmo, miembro de Ecologistas en Acción Albacete, es una figura de protección ambiental cuya importancia avifaunística ha sido reconocida por los el Tribunal Europeo de Luxemburgo con validez científica. Por último, aseguran que no se plantea “un plan de desmantelamiento de la planta cuando se alcance su máxima capacidad”.
Ya hubo negativa anterior de la Junta a autorizarlo
Así, y según Ecologistas en Acción Albacete, la empresa ya solicitó inicialmente, cuando se tramitó el proyecto de la actual planta, autorización para la gestión de residuos peligrosos. “La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha desautorizó en gran parte aquel proyecto, por las consideraciones que hemos señalado y otras más, respecto a los riesgos de contaminación. Por esa razón, entendemos que siguen prevaleciendo aquellas restricciones y, por tanto, no debe autorizarse la ampliación que la empresa solicita en este proyecto”, insisten en sus alegaciones.