Siguen produciéndose las reacciones de condena a la agresión sexual que sufrieron el pasado 20 de noviembre dos activistas de Femen que, con el pecho descubierto, realizaban una protesta antifascista en el lugar donde se celebraba una misa en homenaje al dictador Francisco Franco, coincidiendo con los 50 años de su muerte.
Quienes asistían a la eucaristía organizada por la familia de Franco y la fundación que lleva su nombre las increparon. “Putas”, “guarras” o “fuera de aquí”, fueron algunos de los insultos que los asistentes a misa dedicaron a las dos mujeres, mientras que un hombre que portaba una bandera preconstitucional aprovechaba para manosearlas, en una imagen captada por los medios de comunicación y otras personas que se encontraban en el lugar.
Desde la Asociación Mujeres Progresistas de Toledo han trasladado su “profunda preocupación” y “condena” ante estos hechos.
“No es un episodio aislado ni anecdótico”
Nuria Cuevas, presidenta de la citada asociación, ha señalado que “la celebración de un acto público de homenaje a un dictador, acompañado de cánticos franquistas y simbología asociada a la dictadura”, supone una ofensa para las víctimas del franquismo y resulta contraria a “los principios recogidos” en la Ley de Memoria Democrática.
En cuanto a la agresión sexual sufrida por las mujeres, Cuevas lamenta que “no es un episodio aislado ni anecdótico, sino una expresión directa de una lógica histórica de control sobre el cuerpo de las mujeres”.
Y es que, afirma, este episodio refleja una “lógica machista” de quien “no tolera que una mujer actúe en libertad, decida por sí misma y utilice su cuerpo para expresar una posición política”.
Por último, y recordando que la legislación vigente en materia de libertad sexual (la conocida como ley del solo sí es sí) establece que “cualquier contacto sexual sin consentimiento constituye un delito”, la presidenta de Mujeres Progresistas de Toledo ha demandado que las autoridades “investiguen los hechos, identifiquen al agresor y garanticen la sanción correspondiente”.
Este suceso también fue comentado este viernes el concejal de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, durante el Pleno municipal y de forma posterior, en declaraciones a elDiario.es Castilla-La Mancha, condenaba la actitud del hombre que tocó “sin consentimiento a una joven en las puertas de una iglesia” y lo tildaba de “deleznable”.