Airbnb pide a sus usuarios que presionen al Ayuntamiento de Barcelona y a la Generalitat contra su regulación
Nuevo movimiento de Airbnb en el estira y afloja con las administraciones catalanas por el sector de los pisos turísticos. La plataforma ha enviado un correo electrónico a sus usuarios para pedirles que presionen al Ayuntamiento de Barcelona y a la Generalitat de Catalunya con el objetivo de “parar las restricciones en el sector de los pisos compartidos”.
El mensaje de Airbnb a sus propios usuarios redirige a un portal –con el sello de la plataforma– donde éstos pueden mandar un mensaje a diferentes representantes políticos del consistorio de Colau y del Ejecutivo de Puigdemont: aparecen en la lista de la plataforma el regidor de Turismo del Ayuntamiento de Barcelona, Agustí Colom, el segundo teniente de alcaldía del consistorio, Jaume Collboni, el conseller de Empresa de la Generalitat, Joan Aregio i Navarro o el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueres.
En principio, parece que el mensaje no ha llegado a usuarios que se han dado de alta especificando que su residencia está fuera de Catalunya.
Las reacciones ante la estrategia de Airbnb no se han hecho esperar en las redes sociales, dónde la regidora Gala Pin, responsable de Ciutat Vella (uno de los distritos más afectados por los pisos turísticos ilegales) y también en la citada lista, ha espetado a Airbnb que su gestión sigue siendo “un cáncer para la ciudad”.
Fuentes municipales han añadido que la estrategia de la plataforma es un “método de presión clásico” y que todavía no se han barajado respuestas a dicha estrategia. Por su parte, Airbnb, consultada por este medio, ha destacado que “quiere facilitar que los ciudadanos expliquen a los políticos, con sus propias palabras, qué significa compartir el propio hogar y cómo esta actividad les permite, en muchos casos, llegar a final de mes y seguir viviendo en la ciudad”. La plataforma ha anunciado que “está trabajando con las autoridades en desarrollo de ”normativas claras que apoyen a las personas que comparten sus hogares“.
Si bien hace unas semanas la plataforma de pisos turísticos intentó un “acercamiento” –según su director general, Arnaldo Muñoz– con el Ayuntamiento de Barcelona, que el consistorio calificó de “tomadura de pelo” en tan sólo unas horas, ahora la plataforma vuelve al ataque con una acción que involucra a los usuarios.
El Ayuntamiento de Barcelona hace meses que señala a Airbnb, y otras plataformas de pisos turísticos, como responsables del anuncio de pisos turísticos en la ciudad, lo que les ha acarreado multas por valor de 30.000 euros.
