El SESCAM elimina la vacuna de la gripe para pacientes inmunodeprimidos
Este año los enfermos de cualquier patología crónica inmunodepresora, en la campaña de vacunación de la gripe, han tenido que ponerse una vacuna de las “normales”, de las que se usan en toda la región para la población de riesgo, algo que produce en estos pacientes importantes efectos secundarios por sus bajas defensas.
Hasta ahora estos pacientes disponían de una vacuna más especializada para sus casos ya que al tener menos defensas que el resto de la gente una vacuna normal les provoca efectos secundarios como la propia gripe al no tener defensas que ataquen la carga vírica de la vacuna. Una vacuna que por especialización resultaba algo más cara que el resto de vacunas de la población y que el SESCAM ha suprimido este año.
Así lo cuenta por ejemplo David López Corbelle, que padece la enfermedad de Crohn, una de estas enfermedades que se tratan con fármacos inmunosupresores y que por tanto reducen sus defensas víricas. A él, como a este colectivo de personas, había que ponerle vacuna aunque no sea edad de riesgo por su enfermedad crónica, así como que fuese una vacuna especial y distinta.
El SESCAM emplaza a este tipo de pacientes a ponerse la vacuna habitual de la campaña, algo que en estos pacientes suele derivar en la mayoría de casos en tener la propia gripe al no poder sus defensas con la carga de la vacuna. Ni siquiera los propios pacientes del SESCAM pueden pagarse esta vacuna de su bolsillo, aunque sea más cara, ya que el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha no las ha encargado y la empresa fabricante no tiene existencias destinadas para la región al no ser solicitadas: ni pagando y acudiendo a un especialista para su inyección pueden obtener la vacuna especializada.
Un recorte de poca cantidad de dinero puesto que estas vacunas especializadas aunque son bastante más caras que el resto afectan por fortuna a poca población, pero que son muy importantes para protegerles, más incluso que las funciones de la vacuna normal a los pacientes en los rangos de edad de peligro. Hablamos de pacientes que por su condición particular no están en disposición de pasar ninguna enfermedad y deben tener medidas preventivas para enfermedades que para la mayoría de población pueden ser comunes.
Como cuenta el propio David, en un blog personal que escribe, le quedaron señaladas las palabras que le dijo la enfermera que le atendió sobre el tema: “hijo mío, mientras esto siga así, no podemos ni ponernos enfermos”.
