El decreto que regula los tiempos máximos de espera en Urgencias, “en el aire” sin un aumento de plantilla

Este martes ha entrado en vigor el decreto que regula los tiempos máximos de atención en las Urgencias hospitalarias de la región, aprobado el pasado mes de mayo por el Consejo de Gobierno. Una normativa que se centra en tres medidas: las personas que soliciten asistencia tienen derecho a ser recepcionadas, acogidas y clasificadas en los primeros diez minutos; que los pacientes puedan pasar con acompañamiento siempre que la prestación sanitaria lo permita y que no podrán transcurrir periodos de más de 12 horas sin que se haya facilitado al paciente o sus acompañantes información sobre el proceso asistencial. 

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha subrayado la necesidad de acometer un aumento del número de profesionales para cumplir con los tiempos de espera en los Servicios de Urgencias Hospitalarias. “Contar con una plantilla suficientemente es la mejor manera de prestar una atención de calidad a los usuarios, sin sobrecargar a los trabajadores que desarrollan su labor en Urgencias y que con bastante frecuencia se ven sobrepasados por la gran afluencia de pacientes, especialmente en determinados periodos del año, franjas horarias y días”.

CSIF considera que este Decreto puede provocar “situaciones incómodas” a los profesionales de Urgencias al tener que enfrentarse a las quejas de los usuarios cuando se percaten de que una vez superado el tiempo máximo de espera establecido en el documento volverán a ser clasificados, que no atendidos, para detectar si su estado ha cambiado mientras permanecían en la sala de espera.

“El decreto no garantiza ser atendido por un equipo de profesionales en un tiempo máximo, sino ser reclasificado en un tiempo máximo, como a su llegada, por si hubiese cambiado el nivel de prioridad asignado y actuar en consecuencia”.

CSIF espera que si en un plazo de seis meses el SESCAM elabora un Plan Regional de los Servicios de Urgencias para garantizar los tiempos máximos de atención establecidos, tal y como dispone el Decreto, se contemple la solicitada adecuación de las plantillas de profesionales en Urgencias y la potenciación de la Atención Primaria “como piezas clave para disminuir la espera en urgencias de los ciudadanos”.