La economía verde, alternativa de Equo a la crisis de empresas como Elcogas
Primero fueron los 700 trabajadores que se quedaron sin trabajo en Silicio Solar y Solaria, y más recientemente los que ahora ven amenazados sus puestos laborales en el “muerto viviente” de Elcogas. Con este contexto, desde Equo Castilla-La Mancha quieren recordar al Gobierno regional que Puertollano es una de las principales ciudades españolas cuya industria se ha visto afectada por la crisis económica española, afectando a muchas familias que dependen de ese sector.
Esta formación considera “dramático” que se hayan hecho inversiones hasta el año pasado en innovación y reducción de emisiones para meses después cerrar, al tiempo que califica como “falta de visión” el haber aprobado un plan de viabilidad a 10 años, “sobredimensionando” la central piloto y experimental de Elcogas. En su opinión, debiera haberse puesto en marcha un análisis de las líneas de producción e innovación más “sostenibles” ambiental, económica y laboralmente posibles en Puertollano y su comarca.
Ante el cierre paulatino de esta empresa, Equo considera que ha llegado el momento de abordar la cuestión mediante un plan de medidas de “transición” energética basada en los tres elementos clave del municipalismo verde: cambio de mentalidad de la población, la participación ciudadana en la toma de decisiones “convencidas o no con la transición”, y la promoción de “iniciativas locales sostenibles”, que permitan de una vez una transición energética sin oligopolios de ningún tipo.
Azucena Gual, coportavoz de Equo añade que de abrirse negociaciones para dar continuidad a Elcogas, el Gobierno debe “contemplar en el nuevo plan de viabilidad la transición ecológica hacia un nuevo modelo energético”, lo cual no solo aumentaría en un 20% el empleo en la comarca, sino que “aseguraría los futuros puestos de trabajo”. “Si no se plantea desde esa perspectiva, cualquier aportación económica y cualquier esfuerzo de las personas que dependen directa o indirectamente de Elcogas, sólo alargará la agonía de la empresa y Castilla-La Mancha habrá perdido una oportunidad, donde la equidad y otros valores no sean solo un eslogan, sino una práctica cotidiana, en definitiva un lugar donde querer vivir”, destaca.
Consciente de que es un “reto difícil” para el Gobierno regional la “adaptación mental y económica” hacia otro tipo de modelo industrial, argumenta que existen “grandes ejemplos” en todo el mundo desde hace cuatro décadas tales como Loos-en-Gohelle en Francia con 7.000 habitantes o Friburgo en Alemania con 220.000 habitantes. En estas localidades se ha demostrado que esa transición ecológica, social y participativa “no es solo posible sino que también trae muchos beneficios ambientales, sociales y económicos a la población de una región”.
