Torta pascualina, la receta italiana típica de Semana Santa que es perfecta para compartir en reuniones

Imagen de una deliciosa torta pascualina

Aurora López

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La torta pascualina es una receta tradicional italiana que se asocia fuertemente con las celebraciones de Semana Santa, especialmente en las regiones del norte de Italia, como Liguria, Piamonte y Lombardía. Esta deliciosa tarta salada tiene su origen en las antiguas tradiciones culinarias del país, donde la llegada de la primavera y la Pascua se celebraba con platos elaborados que utilizaban los ingredientes frescos de la temporada. Hoy te traemos la historia de la torta pascualina, así como la receta tradicional para que puedas probarla en casa.

Su consumo es ideal para reuniones de familiares y amigos, puesto que se puede preparar con antelación y se sirve de manera fácil y práctica en porciones. Este manjar italiano, similar a la quiche francesa, al estar compuesto de ingredientes sencillos y naturales como verduras, queso y huevos, resulta delicioso e irresistible sin ser demasiado pesado. Además, este plato lleno de historia, tradición y sabor, es perfecto para disfrutar durante las celebraciones de Semana Santa, ya sea en Italia, América Latina o incluso en algunas regiones de España.

Origen de la Torta Pascualina

El nombre “torta pascualina” proviene del término en latín “pascua”. Esta tarta, que originalmente era una receta de Cuaresma, se preparaba para marcar el final del ayuno y la llegada de la festividad de la Resurrección. En sus inicios, la torta pascualina era un plato vegetal, sin carne, siguiendo las restricciones de la Cuaresma, pero a lo largo de los siglos se fue enriqueciendo con ingredientes adicionales como los huevos. La receta más clásica incluye espinacas, acelgas o alcachofas, además de queso ricota, huevos y mantequilla.

Como añadido, también tiene una base de masa quebrada o de pasta filo, dependiendo de la región, y se caracteriza por su delicado sabor y su combinación de ingredientes frescos y sabrosos. Durante siglos, se ha preparado esta tarta en las casas italianas como un símbolo de abundancia y celebración.

Desde Italia hasta América

Aunque su origen se remonta a Italia, la torta pascualina se ha popularizado más allá de las fronteras italianas, especialmente en países de América Latina debido a la fuerte inmigración italiana. En Argentina, Uruguay y Chile, la torta pascualina se ha convertido en un plato habitual, aunque con ciertas variaciones. La receta mantiene la esencia de la versión italiana, pero suele adaptarse a los ingredientes locales, por ejemplo, usando espinacas, berenjenas o morcilla.

Mientras que, en Italia esta tarta es muy común en las regiones de Liguria y Piamonte, pero su consumo se extiende a otras zonas del país durante las festividades de Pascua. Es común encontrarla en las mesas de las familias italianas como parte del banquete pascual, donde se comparte entre amigos y familiares, lo que hace de esta receta no solo una delicia, sino también un símbolo de unión y celebración.

La Torta Pascualina en España

Aquí, en nuestra geografía, la torta no es tan conocida como en Italia. Sin embargo, en algunas regiones de influencia italiana, como en Catalunya o Valencia, este plato se ha ido introduciendo en las celebraciones de Semana Santa. En particular, la torta pascualina tiene una presencia creciente en restaurantes italianos o en aquellos que ofrecen menús de cocina internacional, sobre todo en ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia. Aunque no se ha arraigado tanto como otras recetas, poco a poco va ganando popularidad debido a su sabor único y su versatilidad.

Cómo prepararla paso a paso

La torta pascualina se trata de una tarta salada elaborada con huevos y espinacas

Estos los ingredientes para hacer una torta pascualina aproximadamente para seis personas:

  • 500 gramos de acelgas frescas limpias
  • 500 gramos de espinaca fresca limpia
  • Una cebolla grande
  • 250 gramos de queso ricota
  • 250 gramos de queso grana padano rallado
  • Ocho huevos
  • 12 láminas de pasta filo
  • Dos hojas de laurel
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra molida al gusto
  • Mejorana al gusto
  • Orégano seco al gusto
  • Nuez moscada molida al gusto
  • Mantequilla o margarina al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra

Aunque su elaboración requiere tiempo y mimo, preparar una torta pascualina es una de esas tareas culinarias que bien merecen la pena: el resultado es un plato sabroso, vistoso y perfecto para compartir en cualquier celebración. Te explicamos cómo hacerla paso a paso:

  • Para comenzar con la receta, tendrás que preparar las verduras. Para ello, primero asegúrate de descartar las hojas que amarilleen y buena parte del tallo. Con el fin de no desperdiciar alimentos, aunque para esta receta no sean necesarias, de las acelgas puedes aprovechar las pencas para otra preparación. Después limpia bien las espinacas y las acelgas en agua fría para quitar cualquier resto de tierra que pudieran tener. Escúrrelas y córtalas en trozos pequeños. Déjalas reservadas.
  • Seguidamente, en una cazuela honda, sofríe la cebolla bien picada en aceite de oliva. Cuando la cebolla esté transparente, será el momento de añadir las acelgas y las espinacas. Una vez agregadas, rehógalas hasta que pierdan el agua completamente. Salpimienta al gusto y añade las hojas de laurel, la mejorana y el orégano. Reserva también hasta que enfríe y retira las hojas de laurel.
  • A continuación, prepara el relleno de la torta, añadiendo al sofrito anterior dos huevos, la ricota y el grana padano. Remuévelo hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
  • Luego, pasa a montar la torta en un molde. Para ello, primero forra con papel de horno y unta con un poco de mantequilla o margarina derretida con la ayuda de un pincel de cocina o con los dedos.
  • Ahora coloca diez hojas de masa filo una a una, dejando parte de ellas fuera del molde, y dispón las hojas en forma de abanico. Pinta cada una de estas hojas con la mantequilla o margarina derretida para evitar que la pasta filo se seque y se rompa.
  • Agrega el relleno al molde y, con la ayuda de una cuchara, haz seis huecos en los que echarás seis huevos enteros, sin cáscara. Cuando lo hagas, el siguiente paso será tapar el relleno con dos hojas de pasta filo pintadas con mantequilla y haz un reborde con la parte de las capas de pasta filo que habías dejado colgando fuera del molde. Pinta también con mantequilla la parte superior de la torta.
  • Por último, cuece la pascualina en el horno precalentado a 180 grados durante unos 40 minutos o hasta que veas que la pasta filo queda tostada. Aunque la torta puede servirse caliente, habitualmente suele servirse fría.
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