No habrá paz para Beady Eye

La banda de Liam Gallagher presenta en Madrid y Barcelona su segundo disco,
Las peticiones de que se reconcilie con su hermano Noel para que ambos vuelvan a reunir a Oasis son habituales en los directos de Beady Eye
Sin embargo, no hay noticias (o rumores) que apunten al regreso de una de las mejores bandas de brit-pop de la historia

Liam Gallagher derrochando simpatía en un concierto de Beady Eye

11 de febrero de 2014 13:17h

Una de las mayores desgracias para el mundo de la música responde a una paradoja: el responsable de la misma es el principal afectado. El perpetrador es el perpetrado. El que la fastidió se perjudicó a sí mismo.

El protagonista de la anterior secuencia es Liam Gallagher, que por sus vicios y mala cabeza destrozó su herramienta de trabajo: la voz. Del Liam que cantaba de forma fabulosa en (What's the Story) Morning Glory? (1995) nos tuvimos que despedir con el nuevo siglo. Ese timbre rasgado y efectivo, especialmente característico y cargado de talento, se evaporó. Y con él la esperanza de que Oasis tuviese uno de los mejores solistas de la historia.

Las adicciones del pequeño de los hermanos Gallagher le pasaron factura. Se podía prever que ocurriría, pero nadie podía pensar que su manera de cantar degenerase de una manera tan evidente. Pero así fue. Lo único que queda de aquel chaval con cara de mala leche que deslumbraba en temas como Whatever (cuando lo interpretaba en directo) es su manera de cantar: rodilla doblada y asalto al micrófono desde abajo.

Tras la repentina pero esperada separación de Oasis, Liam decidió montar Beady Eye junto a todos los miembros del conjunto que acababa de enterrar. Gem Archer, Andy Bell y Chris Sharrock acompañaron al licencioso solista en su nueva aventura; y no les ha salido mal, ya que mantienen a gran parte de la masa de seguidores de Oasis. Es decir, lo mismo que ha logrado Noel Gallagher en solitario.

Beady Eye actúa este miércoles 12 en Madrid y el jueves 13 en Barcelona para presentar su segungo disco, BE. Sus visitas a España siempre son correspondidas por el público, que llenará las salas La Riviera y Razzmatazz respectivamente. El maniqueísmo entre los seguidores de la banda, ya que les gustan sus temas pero a la vez añoran a Oasis, queda compensado por los éxitos de esta última que Gallagher y sus chicos rescatan del baúl, como Wonderwall o Cigarettes & Alcohol. Y ni aun así tendrán paz en forma de que nadie se acuerde de Noel o de aquel grupo del que formaban parte en 2009. Los gritos de “reconciliaos” o “we want Oasis” volverán a ser constantes. Les guste o no.

¿Cuándo volverá Oasis?

Todo el que haya disfrutado con los temas de Oasis no concibe que haya dejado de existir por una pelea entre hermanos atrabiliarios y que no atienden a razones cuando se trata de enfrentarse entre ellos. Tampoco se comprende que sea la borrachera y el destrozo de una guitarra por parte de uno, y la reacción violenta y usando los puños antes de un concierto en París de otro, la que haya acabado con una banda histórica.

Liam Gallagher tiene la voz destrozada por ser un irresponsable, su actitud sigue siendo pueril (aunque ya no se atreva a negarse a cantar durante un concierto), y por su culpa y la de Noel llevamos casi cinco años sin Oasis. Pero es historia viva de la música. Y es muy bueno, aunque pueda resultar cargante. Exactamente como su hermano.

Noel Gallagher dijo en 2011 que Oasis no se reuniría ni ese año ni en 2012. En 2013 Beady Eye lanzó su segundo disco. Recién arracando 2014 no hay ninguna noticia, ni siquiera rumor, que apunte a dicha reconciliación. Pero con estos dos tercos, necesarios entre sí pero que se odian y se boicotean, nunca se sabe.

Por cierto, y hablando de boicots: cuando Coca-Cola decidió utilizar un estribillo de Oasis para uno de sus anuncios, Noel Gallagher dijo: “Now we all drink Pepsi”. Y es que estos dos son capaces de juntarse solo por fastidiar a una multinacional. Por si a alguien le sirve la idea.