Una jueza federal ordena la liberación de Kilmar Abrego, el salvadoreño deportado por error por la Administración Trump

Andrés Gil

Corresponsal en Washington —
11 de diciembre de 2025 16:59 h

0

La jueza federal de distrito Paula Xinis ha dictaminado este jueves que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) debe liberar inmediatamente a Kilmar Abrego García, el salvadoreño deportado por error por la Administración Trump a una macro cárcel de Nayib Bukele.

“Desde el regreso de Abrego García tras su detención indebida en El Salvador, ha sido detenido de nuevo, una vez más sin autoridad legal”, ha escrito la jueza, informa The Associated Press: “Por esta razón, el Tribunal concede la petición de Abrego García de ser liberado inmediatamente de la custodia del ICE”.

Abrego García, de nacionalidad salvadoreña, tiene esposa e hija estadounidenses y lleva años viviendo en Maryland, pero originalmente entró de forma irregular en Estados Unidos cuando era adolescente.

En 2019, un juez de inmigración dictaminó que Abrego García no podía ser deportado a El Salvador porque corría peligro por parte de una banda que tenía como objetivo a su familia.

Cuando Abrego García fue deportado por error allí en marzo pasado, su caso se convirtió en un símbolo para quienes se oponen a la política de mano dura de Trump en materia de migración.

Abrego García fue devuelto a Estados Unidos por orden judicial.

Dado que no puede ser deportado a El Salvador, el ICE ha estado tratando de deportarlo a una serie de países africanos. En su demanda ante un tribunal federal, alega que la Administración Trump está utilizando ilegalmente el proceso de deportación para castigar a Abrego García por la vergüenza que supuso su deportación por error a El Salvador.

Mientras tanto, en una acción separada en el tribunal de inmigración, Abrego García está solicitando la reapertura de su caso de migración para solicitar asilo en Estados Unidos.

Además, Abrego García se enfrenta a cargos penales en un tribunal federal de Tennessee, donde se ha declarado inocente de tráfico de personas y ha presentado una moción para desestimar los cargos, alegando que la acusación es vengativa.