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Competencia multa a Endesa con 260.000 euros por cambiar contratos sin permiso del cliente
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha multado a Endesa Energía con 260.000 euros por cambiar de compañía a un cliente sin su consentimiento y por no aportar la documentación necesaria que acredita la voluntad de los usuarios de cambiar de suministrador eléctrico. Durante la investigación realizada por el organismo se han detectado un total de 17 infracciones leves por incumplir sus obligaciones en relación con la formalización de los contratos de suministro de energía eléctrica y de gas natural.
Competencia ha sancionado a la compañía eléctrica con 170.000 euros por estas 17 infracciones, de las cuales 14 de ellas son contrarias a la Ley del Sector Eléctrico y el resto incumplirían la Ley del Sector de Hidrocarburos. El organismo puntualiza que la empresa no aportó la documentación que acredita la voluntad del cliente de cambiarse de suministrador para 14 contratos de suministro eléctrico. Además, ha constatado esta práctica en otros tres contratos de suministro de gas natural, de los que tampoco disponía de la documentación exigida legalmente.
A esta cantidad, se suma otra multa de 90.000 euros por cambiar de compañía a un particular sin su previo consentimiento. El cliente denunció a través de la Consejería de Economía, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias que Endesa Energía le había cambiado de comercializador de electricidad sin su consentimiento en tres propiedades de un familiar fallecido.
No es la primera vez que el organismo sanciona a la compañía por prácticas similares. A primeros de año ya multó a la empresa con 30.000 euros por incumplir los requisitos de contratación con los clientes, y el pasado diciembre, con 120.000 euros por dar de alta a clientes sin su consentimiento.
Competencia recuerda que las comercializadoras de electricidad y gas natural deben cumplir los requisitos fijados por la ley cuando formalizan sus contratos, sobre todo cuando se trata de consumidores vulnerables. El organismo obligó el pasado septiembre a los principales grupos energéticos a cambiar su imagen de marca para que los clientes puedan distinguir entre la empresa comercializadora que ofrece la tarifa regulada en electricidad (PVPC) y gas (TUR) y la que actúa en el mercado libre.
