“Un enorme agujero negro” que se está “tragando” las mejoras de la economía, del empleo y las políticas sociales en España. Así ha calificado la vivienda el presidente del Consejo Económico y Social (CES), el catedrático Antón Costas, en la presentación de la Memoria anual de organismo sobre la situación socioeconómica y laboral, correspondiente a 2024. El informe, con el consenso de las organizaciones sociales y económicas, aboga por un gran aumento de la construcción de viviendas, en general y también en especial de aquellas para alquiler social. Y “hacerlo rápido”, ha añadido el economista José Ignacio Conde-Ruiz, coordinador de la memoria, para lo que en el CES consideran necesario que salga adelante la Ley del Suelo en el Congreso.
El órgano consultivo eleva este año su alarma sobre el acceso a la vivienda, problema del que ya advertía el año pasado como un riesgo, pero que en este informe sitúa como un lastre de país en un contexto en el que España lidera el crecimiento económico y del empleo en Europa. Sobre todo para las personas más jóvenes y para las más desfavorecidas, pero que en general “se traga” parte de los avances y mejoras económicas del conjunto de la población. Para muestra, ha mencionado Conde-Ruiz, la vivienda ha escalado hasta ser el principal problema de la sociedad en España, por delante del desempleo, según el CIS.
La memoria recoge que se mantiene “la situación de fortaleza de la demanda de viviendas de los últimos años, frente a una oferta que continúa mostrando síntomas de rigidez”. Por ello, el presidente del Consejo Económico y Social ha abogado por la necesidad de aumentar mucho la “oferta de vivienda”, en general, y también de manera especial la destinada al alquiler social, ahora en niveles muy bajos a nivel europeo.
El presidente del CES ha destacado otro punto rojo “intolerable” en España, el aumento de la pobreza infantil en los últimos años, que ha considerado que también se explica en parte por el problema de acceso a la vivienda y para el que ha exigido medidas. “Es una lacra que no se puede permitir” un país desarrollado y en crecimiento económico, ha destacado Costas.
Construir “150.000 viviendas al año”
En concreto, Antón Costas ha explicado que “la velocidad de crucero” que recomiendan en el CES es de una construcción de unas “150.000 viviendas al año, probablemente los primeros años tendría que ser un poco superior”.
La memoria menciona por su parte que haria falta construir “850.000 viviendas” de alquiler social para que el parque público de España alcanzara niveles europeos. El parque de vivienda social en España ofrece cobertura “al 3,3% de los 18 millones de viviendas principales, proporción que contrasta con las superiores al 15â¯% en algunos de los principales países europeos (Países Bajos, Austria, Dinamarca, Francia o Suecia), y con el 8% de media en la UE”, recoge la memoria.
Antón Costas destacado que “dada la magnitud” del problema en la actualidad, que ha tildado de “enorme”, la construcción de viviendas debe ser en gran volumen pero también “rápida”, ha destacado el cátedratico, algo que ha considerado que requiere “un pacto de Estado” para que salga adelante la Ley del Suelo en el Congreso, que ya acumula dos fracasos.
José Ignacio Conde-Ruiz ha coincidido en la urgencia. “¿De qué le sirve a un joven de 30 años que no se pueden independizar que le digas que esto en diez años está solucionado? Es un problema que va a ir a más”, ha apuntado el economista de Fedea, consejero del CES nombrado por el ministerio de Economía. Con un gran y rápido aumento de la oferta, Costas ha considerado que debería reducirse el precio y facilitar la vivienda más asequible.
Sin análisis sobre el control de precios
La receta de aumentar la construcción de vivienda no es nueva y no está tan claro que esté funcionando. A las preguntas sobre si serían necesarias medidas adicionales, como por ejemplo de control de precios del alquiler, los responsables de la memoria del CES han destacado que no han incluido esta medida porque no hay datos oficiales aún de análisis sobre los efectos de la Ley de la Vivienda, que además se ha aplicado de forma muy parcial en el país.
Costas ha indicado que el Gobierno de Catalunya ha informado de que ha registrado un descenso de los precios tras aplicar la Ley de Vivienda, pero el presidente del CES ha añadido que no tienen datos sobre la oferta de vivienda, por lo que el órgano consultivo no podía hacer un análisis completo de la situación. Además, para lograr un consenso en su memoria y dictámenes, es habitual que el CES evite algunos temas más conflictivos y que generan más diferencias entre sus representantes, con intereses y posiciones muy distintos, como por ejemplos las patronales y los sindicatos.
En cualquier caso, Antón Costas ha valorado que la Ley de la Vivienda está “bien orientada”, pero que solo tiene “efectos paliativos”. Es decir, que alivia la accesibilidad, pero que en su opinión no soluciona el problema, que requeriría de este aumento drástico de la oferta a través de una reforma de la Ley del Suelo.