En 1900, las ciudades eran lugares muy diferentes a lo que son hoy. La gran mayoría tenían todavía calles de tierra o adoquinadas de manera irregular. Las redes de alcantarillado eran incompletas o inexistentes, y las aguas residuales convivían con la vida cotidiana, lo que provocaba problemas de salubridad y epidemias frecuentes. La construcción de infraestructuras básicas era una urgencia, dado que la industrialización empujaba a miles de personas del campo a la ciudad. Fue entonces cuando surgieron los primeros servicios públicos: el alumbrado eléctrico empezó a sustituir al gas, los tranvías comenzaron a marcar el inicio del transporte colectivo y las obras públicas se convertían en el motor del progreso.
En ese contexto nacía en Barcelona Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), una empresa que poco después, en 1911, recibió dos ambiciosos encargos: limpiar y recoger las basuras de las calles y construir el puerto de la ciudad. Había nacido una empresa destinada a cambiarlo todo.
Hoy, 125 años después, el Grupo FCC celebra su aniversario convertido en una multinacional presente en más de 25 países y en uno de los grandes actores globales de la ingeniería y la construcción sostenible. Un recorrido que va mucho más allá de diseñar y ejecutar infraestructuras, se trata de una compañía que participa activamente en la transformación urbana, la acción climática y la responsabilidad social a escala mundial.
La solidez de ese camino se refleja en los principales rankings internacionales. Este 2025, la empresa ocupa el puesto 27 del Top 250 International Contractors de Engineering News-Record (ENR), siendo la cuarta constructora española en la lista y líder mundial en gestión de residuos. A este reconocimiento se suma el Premio de Oro Eduardo Barrachina 2025, concedido en Reino Unido a su presidenta, Esther Alcocer Koplowitz, por la excelencia de la compañía en el mercado británico y su aportación a las relaciones bilaterales.
Más crecimiento, más exigencia
Pero si algo define la etapa actual de FCC es que el crecimiento va de la mano de una estrategia ESG (Ambiental, Social y de Gobernanza) cada vez más exigente. La compañía ha aprobado una ambiciosa Política de Acción Climática con el objetivo de alcanzar la neutralidad climática en 2050. Y este mismo 2025 ha dado pasos clave en transparencia ambiental: debutando en el Carbon Disclosure Project con una calificación Management (B), y obteniendo la máxima puntuación en iniciativas de reducción de emisiones.
Además, FCC Construcción ha publicado su primer informe de Huella Hídrica, verificado bajo los estándares de la Water Footprint Network en todos los países donde opera, y ha renovado por tercer año consecutivo el sello Calculo, Reduzco y Compenso, verificando el 100% de sus emisiones en 22 países. Un enfoque que se traduce en proyectos concretos, como la ampliación de la autovía A-465 en Gales, donde la mejora del tráfico se combinó con la plantación de más de 120.000 árboles, la creación de hábitats para fauna y la construcción de pasos específicos para especies protegidas.
La capacidad técnica de la corporación se refleja también en obras que ya forman parte del paisaje global. El renovado estadio Santiago Bernabéu fue reconocido por ENR como la mejor infraestructura deportiva del mundo en los Global Best Projects Awards 2025, gracias a innovaciones como el campo retráctil o su piel digital. A ello se suman proyectos internacionales como el Parque Deportivo del Atlético de Madrid o la futura Ciudad Deportiva Príncipe Faisal bin Fahad en Arabia Saudí, en el camino hacia el Mundial de 2034.
De Riad a Nueva York
En transporte, FCC firma algunos de los grandes hitos de la movilidad del siglo XXI. El Metro de Riad, con 176 kilómetros de líneas en pleno desierto, fue premiado por ENR como la mejor infraestructura ferroviaria internacional. En Norteamérica, destacan la Fase 2 del Metro de la Segunda Avenida de Nueva York y la ampliación del Metro de Scarborough en Toronto, con una inversión cercana a los 4.000 millones de euros. En Europa y Latinoamérica, avanzan proyectos como la ampliación de la Línea 5 del Metro de Madrid al aeropuerto, las líneas 2 y 4 del Metro de Lima o la innovadora Línea Rubí del Metro de Oporto, donde se emplean gemelos digitales para monitorizar obra y arbolado en tiempo real.
El compromiso del grupo también se mide en personas. Más de 71.000 profesionales forman parte de él, reconocido como Top Líderes LGBTI+ 2025 y una de las 25 empresas más inclusivas de España. La compañía figura además entre las 50 mejor valoradas en los InfoJobs Awards y como la cuarta más responsable en ESG de su sector según MERCO. En el ámbito social, proyectos como las viviendas modulares en Cairns (Australia) demuestran cómo la ingeniería puede acelerar soluciones habitacionales reales.
125 años después de su fundación, el mundo ha cambiado mucho, También lo ha hecho FCC, que reafirma su papel en los grandes debates globales sobre desarrollo sostenible, participando en foros como el aniversario del Pacto Mundial de la ONU o la Conferencia sobre Financiación para el Desarrollo. Con una sólida cartera de proyectos y la mirada puesta en 2050, la compañía sigue construyendo infraestructuras, pero también futuro.