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El Canal de Isabel II quiere irse de Cáceres y el ayuntamiento le recuerda que le quedan 22 años de contrato

Canal de Isabel II valorará la posibilidad de acabar con su actividad en Cáceres y Lanzarote

El Canal de Isabel II ha planteado la posibilidad de acabar con su actividad en Cáceres, donde tiene adjudicado el contrato de gestión, siendo aquí una delegación del canal. También se plantea acabar con su actividad en Lanzarote, donde es propietaria de la empresa Canal Gestión Lanzarote SAU.

Así lo manifestó el consejero de Presidencia y Justicia y presidente del Canal de Isabel II, Ángel Garrido, con motivo de la primera Junta General de Accionistas tras destaparse la trama Lezo, que implica supuestas irregularidades cometidas en el seno de la empresa de aguas madrileña.

El Gobierno de Cristina Cifuentes ya había anunciado su intención de centrar su actividad en España acabando con sus empresas en Latinoamérica y limitando su actividad en el extranjero a labores de ingeniería y consultoría. En lo que respecta a la actividad dentro de España, Garrido explica que se evalúa la posibilidad de la venta de las empresas.

Ante la posibilidad del cese la alcaldesa cacereña Elena Nevado recuerda que existe un contrato en vigor en la gestión del servicio con una validez de 24 años de los que sólo se han cumplido dos. Señala que ha mantenido conversaciones con la empresa para conocer de primera mano sus planes y si éstos pueden afectar a la capital cacereña.

El Ayuntamiento ha recordado que existe un contrato en vigor, que se firmó en marzo de 2015, que cuenta con una vigencia de 24 años y que se debe cumplir en base a las cláusulas que fija las condiciones. Entre esas cláusulas se halla la aplicación de rescisión, que siempre debería ser de mutuo acuerdo, por lo que el servicio “sigue con total normalidad”.

El contrato con Canal de Isabel II incluye un canon inicial de 30 millones de euros con “un exceso de canon” de nueve millones en cuatro años, además de inversiones fijas por valor de 13 millones de euros, a ejecutar en 15 años, y mejoras de inversión por valor cercano a 10 millones de euros a ejecutar en los cinco primeros años. El Consistorio Municipal ha incidido en que el servicio “está garantizado en la actualidad y ante cualquier posible escenario”. 

También ha explicado que hasta los cinco años, es decir, hasta marzo de 2020, no se podría plantear ninguna rescisión del contrato de gestión del servicio del agua de Canal de Isabel II con el Ayuntamiento, y siempre tendría que ser de mutuo acuerdo. 

En cuanto a la posibilidad de ceder la concesión a un tercero, Nevado ha negado que esta opción se pueda hacer sin el consentimiento del Ayuntamiento y ha recordado que el Canal concursó “voluntariamente”. Justifica que trabajar con una empresa pública es “más transparente pero genera más problemas a la hora de trabajar diariamente”. La alcaldesa ha señalado que “no contemplamos la rescisión y Canal tampoco lo contempla, y de lo que hablan es de analizar y por ello no hay que alarmar”.

Llamamiento de la oposición 

Desde la oposición, PSOE y Cáceres Tú instan a la regidora a que tome medidas para garantizar el servicio del agua ante la “amenaza” de la empresa. También le piden que solicite información sobre la solvencia de la empresa, mientras que Cáceres Tú ha instado a iniciar los estudios para la remunicipalización del servicio el agua.

El portavoz municipal del PSOE, Luis Salaya, dice que están preocupados ante la amenaza con dejar la concesión del agua. “Pedimos a la alcaldesa que empiece a trabajar en buscar alternativas y en garantizar la prestación del servicio”.

Ha manifestado su temor de que la trama “Lezo” en la que está envuelta la empresa “pueda salpicar a los cacereños, por lo que demandamos medidas para garantizar un servicio que es fundamental para la ciudadanía”.

Por parte de Cáceres Tú advierten que cualquier cambio en el titular de la explotación de la concesión administrativa tiene que ser aprobado por el Pleno municipal. Ha apuntado además que el Canal de Isabel II fue sancionada “con lo mínimo” por incumplimientos del contrato, y que en el momento en que se controla la concesión “parece que no interesa cumplir con el contrato porque no es rentable”. Por todo esto apoyarán al equipo local de Gobierno si está dispuesto a 'remunicipalizar' un servicio que siendo público es “más eficiente y de mejor calidad” para los cacereños.

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