Los ayuntamientos vascos reclaman ser parte activa de la puesta en marcha de medidas para atajar el grave problema de vivienda, pero quieren ir más allá de “regalar” suelo al Gobierno vasco para que sea éste el que construya. Facilitarlos sí, pero no sólo eso, porque quieren dejar claro que los municipios también tienen competencias en materia de vivienda, pero les falta “recursos y herramientas” para ponerlas en práctica.
La presidenta de la Asociación de Municipios Vascos (Eudel), que es la alcaldesa de Derio por el PNV, Esther Apraiz, ha comparecido este miércoles en la comisión parlamentaria por la que están pasando diferentes asociaciones y expertos para realizar aportaciones a la ley de medidas urgentes en materia de Vivienda que se está tramitando en la Cámara vasca. En su intervención, ha apostado por que la nueva ley incremente la oferta de vivienda protegida asequible, pero también “hacer más accesible la vivienda libre” para no dejar fuera a las clases medias, en línea con lo que defiende su partido, y a dar a los jóvenes la “posibilidad de elegir” si quieren vivir de alquiler o en propiedad.
Apraiz ha dejado clara la disposición municipal para colaborar en la búsqueda de soluciones al problema habitacional. Pero, a la vez, ha señalado que “si se quiere que los ayuntamientos colaboren de manera activa, más allá de regalar recursos de patrimonio municipal de suelo al Gobierno vasco”, los municipios necesitan “recursos técnicos y económicos para incrementar su capacidad de actuación”, en un ámbito en el que ha recordado que “también son competentes”. Herramientas para “agilizar las capacidades de gestión en el ámbito urbanístico”, y recursos económicos para “viabilizar la promoción de suelo y construir vivienda en sus diferentes modalidades”, ha señalado.
Precisamente, una de las críticas del consejero de Vivienda, Denis Itxaso, hacia los ayuntamientos ha sido las reticencias de algunos municipios para ceder el suelo al Gobierno vasco para edificar viviendas sin contrapartidas. La presidenta de Eudel se ha mostrado abierta a la colaboración, porque hay que actuar ante el problema de la falta de vivienda “con la mayor celeridad posible” y desde la colaboración institucional. Pero ha puesto de manifiesto la necesidad de defender la autonomía local y el respeto a la diversidad de los municipios.
En este sentido, además de pedir más recursos para las actuaciones municipales, ha solicitado que se tenga “más en cuenta las promociones de viviendas en municipios de menos tamaño”. Y ha recordado que estos municipios pequeños, “en ocasiones tienen demanda de vivienda protegida, pero las promociones no terminan de arrancar”. “Las medidas que se tomen deben ser capaces de dar soluciones a todos, grandes y pequeños ayuntamientos”, ha apuntado.
La presidenta de Eudel ha considerado que hay que tener en cuenta a la hora de poner las medidas en práctica el tamaño, la ubicación geográfica y la realidad demográfica del municipio, porque cambian las necesidades. En cualquier caso, ha considerado prioritario que se den más facilidades para que las promociones de vivienda protegida “prioricen a las personas jóvenes y residentes en los municipios”.
Además, la nueva ley tiene que enfrentarse a un “doble reto”. Por un lado, incrementar la oferta de vivienda protegida asequible. Y por otro, “hacer más accesible la vivienda libre para las clases medias”. “No podemos abordar la solución a un problema que afecta a toda la sociedad pensando únicamente en las necesidades y la realidad de personas vulnerables, y dejar de lado al grueso de la sociedad, las clases medias”, que según ha recordado, “sufren” también el problema de acceder a una vivienda.
“A pesar de contar con formación y con trabajo, no pueden acceder ni a una VPO ni a una vivienda en propiedad, que es lo que desea la mayoría”, ha señalado. En este sentido, ha insistido en que “hay que construir más vivienda protegida, pero también hay que buscar fórmulas para hacer más accesible la vivienda en propiedad”. “No podemos quitar a la juventud vasca el derecho a poder elegir si quieren o no vivir de alquiler o en propiedad, o si pueden o no querer una vivienda libre”, ha concluido la dirigente del PNV.