Foster apadrina la cuenta atrás para el nuevo Bellas Artes de Bilbao: un edificio reinventado que unirá pasado y futuro

Ya está en marcha la cuenta atrás para que la magia arquitectónica de Norman Foster cambie la cara del Museo de Bellas Artes de Bilbao y lo llene de luz. Si no hay retrasos en las previsiones, a finales de 2024 'Agravitas', como se ha denominado el proyecto ideado por el equipo que forman el arquitecto Norman Foster y el bilbaíno Luis María Uriarte, se levantará imponente extendiendo el actual edificio con 6.743 metros cuadrados de nueva construcción y la remodelación de los otros 8.000 metros ya existentes. Un edificio “reinventado”, levantado sobre la base del actual, que, como ha señalado el propio Foster, unirá la “herencia del pasado con el museo del futuro” en un “reciclaje” perfecto.

El prestigioso arquitecto británico ha participado en el acto institucional de la colocación de la primera piedra de unas obras que se han gestado con una pandemia de por medio -el concurso para buscar los arquitectos se puso en marcha en 2019- y con una crisis económica que ha encarecido mucho el coste sobre lo previsto por el elevado precio de las materias primas en estos momentos. De hecho, la adjudicación final a la UTE de empresas constructoras se ha realizado por 33,95 millones de euros, cuando el coste previsto en el primer proyecto de Foster situaba el gasto en 18,65 millones de euros. A este precio hay que añadirle un mínimo de otros diez millones más en diversos conceptos como el gasto en equipamientos, saneamientos, honorarios de arquitectos y asistencias técnicas (6,7 millones), la adquisición de un local en la calle Máximo Aguirre y su acondicionamiento para trasladar las oficinas mientras duren las obras (2,2 millones de euros), más 1,4 millones de gastos financieros derivados del crédito de 25 millones suscrito en el inicio para afrontar las obras y que será amortizado con las aportaciones de las tres entidades fundadoras del museo: el Ayuntamiento de Bilbao, la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno vasco, que contribuyen a partes iguales a la financiación del museo.

Pero todos los que participaron ayer en el acto institucional encabezado por Foster, hicieron hincapié en que esta remodelación supone una inversión de futuro no solo para el museo, sino para Bilbao y por extensión para todo Euskadi. “Es una gran apuesta para las futuras generaciones y eso merece la pena celebrarlo”, ha señalado Foster que ha destacado que Bilbao es una ciudad “que se reinventa en cada momento” y constituye “una fuente de inspiración”. Norman Foster tiene ya su sello inscrito en la transformación que la capital vizcaína ha experimentado en los últimos años. Fue el artífice arquitectónico del Metro de la capital vizcaína, que tiene ya 27 años, con sus icónicas entradas a las estaciones , convertidas en imagen inconfundible de la ciudad, que se conocen como 'fosteritos' en honor del que las ideó. Y esta es la idea de la ampliación del Bellas Artes: adaptarlo a los nuevos tiempos, ampliarlo, llenarlo de luz, y a la vez, dotar a la capital vizcaína de un nuevo edificio icónico dentro del importante hueco arquitectónico y cultural que se está labrando en el panorama internacional.

El acto protocolario con el que se inicia la cuenta atrás para las obras, durante las cuales el museo no se cerrará al público, ha consistido en enterrar una cápsula del tiempo con varios periódicos en papel de este jueves, unas monedas de curso legal y el acta de replanteo que formaliza el último trámite de ejecución de la obra. Se ha enterrado en el exterior del museo, junto a la fachada acristalada de la Alameda Conde Arteche que da al Parque de Doña Casilda, que es por donde el museo, manteniendo la entrada por su fachada original de 1945, se extenderá primero, para luego crecer hacia arriba.

La ceremonia no ha dejado lugar a dudas de la importancia de esta obra, por los que han participado en ella, además de los dos responsables del proyecto, Norman Foster y Luis Uriarte, el consejero de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco, Bingen Zupiria; el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, el director del Museo, Miguel Zugaza (ex del Prado); el presidente de Fundación Bancaria BBK, Xabier Sagredo, la diputada foral de Euskera, Cultura y Deporte, Lorea Bilbao, además de representantes de todo el abanico político y social y cultural vasco. Dos Amigas del Museo, la más antigua (Carmen López Niclós) y la más joven (Rut Salaverri) son las que han procedido a colocar la cápsula en un habitáculo dentro del césped. Tras el acto los asisntentes han posado ante el vallado diseñado por Mikel Garay que rodeará el edificio durante la ejecución de las obras que se prolongarán durante 22 meses.

En sus intervenciones, Miguel Zugaza ha señalado que se trata de un proyecto de futuro para el museo y para “la extraordinaria oferta cultura y artística de este país”. “Podemos felicitarnos de que comienza a hacerse realidad esta ampliación y el tiempo empieza su cuenta atrás para el día de su inauguración, prevista a finales de 2024”. Xabier Sagredo, presidente de la BBK ha señalado que se renuevan “cinco décadas de una acción conjunta que tomará nuevo impulso en el espacio BBK Museoa, que, en sus más de 2.000 metros cuadrados, ofrecerá un intenso programa de exposiciones y actividad pública”. El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ha valorado la extraordinaria oportunidad de volver a contar en Bilbao con el talento de Norman Foster, que, unido al trabajo de Luis María Uriarte, ofrece un “ilusionante y nuevo protagonismo a la propuesta, que aúna calidad arquitectónica, sensibilidad urbana y responsabilidad social para levantar un hito luminoso y leve en el corazón histórico de Bilbao”, mientras que el consejero Bingen Zupiria ha señalado que el proyecto abre una nueva etapa para el museo y ha remarcado que su importancia es de mayor alcance porque subraya la evolución de una de las instituciones artísticas decanas de Euskadi, que revalida así su vigencia y su capacidad transformadora de la cultura y el arte con el apoyo de las instituciones vascas. En este sentido, ha destacado que “uno de sus rasgos ha sido la manera en cómo se ha relacionado con la sociedad y esta ampliación aportará nuevas oportunidades para mirar al futuro con ambición”.

Norman Foster se ha mostrado “encantado” de celebrar el nacimiento de este proyecto que “unirá la herencia cultural del pasado con el museo del futuro” y ha agradecido a todas las instituciones y patronos que participan en el proyecto “por creer en el papel transformador del arte en el desarrollo urbano”.

Proyecto 'Agravitas', y los hitos de la ampliación

La idea conductora del proyecto ideado por Foster es recuperar el protagonismo del edificio de 1945, restableciendo su entrada original. Sobre las instalaciones existentes se proyecta un espacio que se asienta sobre los edificios de 1945 y 1970, sobre los que se levantarán dos plantas. Además convierte la plaza del Monumento a Arriaga en el nuevo corazón del eje vertebrador del museo.

La hoja de ruta de esta transformación arquitectónica quedó fijada en el Plan Estratégico 2019-2022, aprobado por el Patronato el 11 de diciembre de 2018. El primer paso para su consecución fue la convocatoria el 11 de febrero de 2019 del concurso internacional de proyectos para la Ampliación y Reforma del Museo de Bellas Artes de Bilbao. El concurso contó con la financiación de BBK, Patrono de Honor del museo y fiel aliado en los momentos más decisivos de su historia reciente.

De los 57 equipos admitidos en la primera fase, el jurado resolvió los seis finalistas el 8 de abril de 2019 y, finalmente, el 23 de julio se dio a conocer el fallo del concurso a favor del proyecto con el lema 'Agravitas', presentado por Foster+Partners + LM Uriarte Arkitektura. El dictamen, alcanzado por unanimidad, resume así las fortalezas del proyecto: “Tecnológica en su imagen, humanística en su enfoque y ecológica en su sostenibilidad, la propuesta aúna calidad arquitectónica, sensibilidad urbana y responsabilidad social para levantar un hito luminoso y leve en el corazón histórico de Bilbao”.

El 31 de marzo de 2022 el museo publicó en la Plataforma de Contratación Pública en Euskadi la licitación para la ejecución de la obra -que tuvo que ser reformulada al quedar desierto el concurso debido a la actual coyuntura-. El 9 de septiembre de este año fue adjudicada a la UTE Ampliación Bellas Artes compuesta por Empresa constructora Urbelan, S.A. + Altuna y Uria, S.A. + Campezo Obras y Servicios, S.A. y Teusa Técnicas de Restauración, S.A. El levantamiento del acta de comprobación del replanteo fue realizado el pasado día 8 de noviembre, trámite necesario para la ejecución de las obras.