Alrededor de 132 alumnos ciegos de Extremadura vuelven a la actividad escolar
Los equipos de la ONCE y las administraciones educativas están asumiendo esfuerzo, colaboración y apoyo para conseguir estos logros.
Ocho se preparan en la Universidad para obtener los conocimientos y aptitudes que les cualifiquen para su posterior incorporación al mercado laboral.
En los demás niveles educativos, 25 escolares comienzan la Educación Infantil; 19 están escolarizados en Educación Primaria; 21 han llegado a la Educación Secundaria Obligatoria; 6 cursan Bachillerato; 7 se preparan en la Formación Profesional; y 46 están inscritos en otro tipo de enseñanzas.
La inclusión de este alumnado en un ámbito educativo normalizado, ha explicado, responde a la legislación vigente, donde existe un único sistema en el que prevalece el derecho de cualquier alumno a recibir una atención educativa equitativa y de calidad, respetando sus necesidades específicas para posibilitar su plena inclusión educativa y social.
Vital la producción bibliográfica de la ONCE
Así, los profesionales que componen los equipos específicos de atención educativa a personas ciegas trabajan intensamente para planificar el conjunto de intervenciones que van a llevar a cabo durante todo el curso escolar.
Los servicios de producción bibliográfica de la ONCE trabajan intensamente para que el alumnado con ceguera pueda disponer, desde el primer día de clase, de los mismos libros de texto que sus compañeros, solo que transcritos al sistema braille, así como toda la documentación necesaria en formato accesible.
Muchos de ellos cuentan además con adaptaciones tecnológicas e informáticas facilitadas por la ONCE para seguir el curso en igualdad de condiciones: ordenadores con síntesis de voz; anotadores y calculadoras parlantes; o impresoras en braille, entre otras.
Implicación de diversos expertos
Están compuestos por distintos profesionales, expertos en distintas áreas de intervención en discapacidad visual: maestro, técnico de rehabilitación, psicólogo, pedagogo, trabajador social e instructor en tecnología accesible (tiflotecnología).
Para cada alumno y alumna se elabora un plan individualizado de atención, según sus necesidades, y se le asigna un maestro o maestra itinerante encargado, entre otras funciones, de asesorar al centro y al profesorado de aula, asesorar y orientar a las familias y realizar el apoyo directo que necesite cada alumno.