La portada de mañana
Acceder
La reivindicación de salarios más altos y menos jornada marca el Primero de Mayo
A tres metros del abuelo tras años buscándole: familias visitan las Cuelgamuros
Análisis - Sánchez, ¿acicate o lastre para Illa? Por Neus Tomàs

Cuatro represaliadas por la dictadura inauguran la oficina de atención a las vítimas del franquismo en A Coruña

Carmen Seijas, Elvira Varela Bao, Luisa Vázquez y Celsa Cabanela. Son cuatro mujeres coruñesas, ya ancianas. Las cuatro sufrieron la represión de los golpistas en 1936 y de la posterior dictadura. Elvira Varela vio como su familia era perseguida por su militancia política -su madre era Elvira Bao, maestra y militante galeguista-. A Celsa la detuvieron por comunista y a Carmen la perseguían para intentar que delatara sus hermanos.

Son algunos de los retazos de memoria que las cuatro mujeres han dejado esta semana en la inauguración de la oficina de atención a las víctimas de la represión del golpe y del franquismo en A Coruña, el primer servicio como este en Galicia, que el Ayuntamiento y la Universidad coruñesa acaban de poner en marcha en la Casa-Museo Casares Quiroga de la ciudad. Una aportación municipal de 40.000 euros a un convenio rubricado por el alcalde, Xulio Ferreiro y el rector, Julio Abalde, permite abrir la oficina, pero también que arranque la Cátedra Institucional de Memoria Histórica de la UDC.

“La oficina -dice Ferreiro- es un recurso más dentro de un proyecto más amplio”, ya que la apertura de la Cátedra implica investigación en materia de memoria histórica y su posterior divulgación. “Aun hoy existen voces que, erradamente, insisten en que en Galicia no hubo represión”, algo que “sabemos que no es cierto”. Al tiempo, subraya el regidor, continúan existiendo “muchas familias que demandan información” sobre lo que les pasó a sus parientes.

Esa búsqueda de información, ya iniciada en el pasado por otras investigaciones como la del desaparecido proyecto interuniversitario Nomes e Voces, se realizará a partir de la propia oficina. Allí “se recogerán demandas y aportaciones sobre las que después hacer pivotar las investigaciones a través de la Cátedra”. Quien busque o pueda ofrecer información sobre la represión franquista en A Coruña puede acudir a la Casa-Museo Casares Quiroga de lunes a viernes, de 11.00 a 13.30 y de 18.00 a 20.00 horas.

Según el Ayuntamiento coruñés, la apertura de la oficina de atención a las víctimas de la represión franquista es “un escalón más” en materia de memoria histórica en la ciudad. Se une, dicen, a acciones más simbólicas como la eliminación del callejero de nombres ligados a la dictadura y sus promotores -cambios pendientes desde 2009, cuando habían sido aprobados en pleno- o la puesta en marcha del Consejo de la Memoria Democrática de A Coruña, que comenzó su actividad recibiendo el encargo de elaborar un estudio sobre la casa Cornide, espoliada por la familia Franco.