En los presupuestos de la Xunta de Galicia para el año a punto de terminar había reservados 700.000 euros para pagar 41 curas en los hospitales públicos. La medida, en marcha desde que la instauró Manuel Fraga Iribarne a medidados de los 90, suscita cada vez más críticas. Pero el Gobierno de Feijóo la mantiene. Este jueves, en una comparecencia en comisión parlamentaria, la directora de Recursos Humanos del Servizo Galego de Saúde, Ana Comesaña, desveló que es la Iglesia la que tiene en nómina a los capellanes y, por lo tanto, formaliza los pagos efectuados con dinero público.
Comesaña respondía a una pregunta del Partido Socialista, cuyo diputado Julio Torrado, informa Europa Press, urgió a contratar más personal sanitario y menos sacerdotes. La alto cargo de la Xunta aseguró que “el Sergas no reconoce irregularidades” en el sistema de asistencia de sacerdotes en sus centros y que el origen del acuerdo con la Iglesia está en un acuerdo marco del Estado con el Vaticano. El Sergas suscribió en 1995 con los obispos gallegos un convenio para prestar la asistencia religiosa católica en los centros sanitarios públicos. Al respecto, ha explicado que los sacerdotes dependen de las gerencias sanitarias en materia de organización, mientras que es la Iglesia la que les paga el sueldo.
El portavoz de Sanidade del Grupo Socialista, Julio Torrado, ha denunciado que el Sergas “expulse a sanitarios del sistema” mientras aumentan hasta 721.000 euros la partida para pagar sacerdotes dentro de los centros hospitalarios. Por ello, ha preguntado “por qué prefieren sacerdotes que médicos”. El diputado socialista ha apuntado que con las partidas para sacerdotes “podrían pagar 13 médicos de familia comunitarios, 24 enfermeras especialistas para Atención Primaria, 14 psicólogos, 23 fisioterapeutas, 36 trabajadores para servicios generales, 25 trabajadores sociales o 21 matronas”.
Por ello, ha reprochado que todos esos profesionales “no están contratados porque el Sergas decide destinar más de 700.000 euros al año a pagar capellanes”. El socialista ha criticado que alega el Sergas que pagan a los obispados pese a que incluyen 52 capellanes en el anexo de personal de los Presupuestos de la Xunta, por lo que critica el PSOE que “los financian pese a que no corresponde a la competencia pública del Estado”.