La ONU eleva a 1,4 millones los desplazados en Gaza, casi dos tercios de la población

La secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, había reclamado este sábado que la cumbre internacional que se celebra en Egipto para atajar la guerra en Gaza sirviera para “comenzar a frenar el genocidio contra el pueblo palestino” con “presión internacional” sobre el Gobierno de Benjamín Netanyahu, seguida de “sanciones económicas” si el Ejecutivo israelí no cede.

Pero el cierre de la cumbre, sin declaración conjunta, ha sido calificado por Belarra como “descorazonador”.

La cumbre internacional de El Cairo, a la que asiste el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, además de otros líderes europeos y el secretario general de la ONU, António Guterres, analiza la escalada del conflicto tras el ataque de Hamás del 7 de octubre seguido de bombardeos incesantes desde entonces por parte de Israel sobre una Gaza a la que ha dejado sin luz, agua ni alimentos.

Israel contabiliza unos 1.400 muertos y las autoridades palestinas más de 4.000 palestinos fallecidos, la mayoría civiles en ambos casos.

Así, Belarra había reclamado que la cumbre tuviera rango “operativo”, para que las grandes potencias “presionen a Israel y consigan que acaben los bombardeos a la población civil palestina”, así como que acaben “los cortes de suministro” de agua o electricidad, “que van a provocar miles de muertes de manera agónica”.

Si Israel no reaccionase a esa “presión internacional”, Belarra ha apostado por “sanciones económicas” para que dicho Estado “no pueda mover ni un euro o dólar de sus cuentas en el extranjero”, reclamando además “el embargo de armas” y la suspensión de la exportación de material militar a dicho país, que según ha avisado “lleva décadas de política de ocupación ilegal y apartheid” contra la población palestina.

Así, Belarra ha alertado de que tras el ataque de Hamás, Israel está desplegando todo un “castigo colectivo” contra la población palestina, que supone un “incumplimiento del derecho internacional humanitario”.

elDiario.es

Unas cien mil personas, según la estimación de la Policía de Londres, han salido este sábado a las calles de la capital británica, por segundo fin de semana consecutivo, para protestar por la campaña de bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza, en los que ya han muerto más de 4.400 personas.

Los manifestantes han marchado hasta las inmediaciones de Downing Street, residencia del primer ministro británico, Rishi Sunak, que esta semana viajó a Israel para mostrar su apoyo al Estado judío.

Los manifestantes han portado banderas palestinas y pancartas en las que podía leer “libertad para Palestina” y “detened la guerra”, y han cantado eslóganes como “desde el río hasta al mar, Palestina será libre”, informa la Agencia EFE.

La milicia palestina Hamás ha asegurado este sábado que no negociará el destino de los rehenes israelíes hasta que no cese la “agresión” sobre la Franja de Gaza, según informa la agencia Reuters. Israel ha confirmado este fin de semana que un total de 210 ciudadanos están en poder de Hamás desde el ataque del pasado 7 de octubre.

“Nuestra postura es clara: está relacionado con un (posible) intercambio de prisioneros y no lo vamos a negociar hasta que Israel cese su agresión sobre Gaza y los palestinos”, ha declarado un líder de Hamás, Osama Hamdan, desde Líbano. Este viernes, la organización liberó a dos ciudadanas estadounidenses “por motivos humanitarios” tras la mediación de Qatar.

La relatora especial de la ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, Francesca Albanese, ha lamentado que un bombardeo israelí haya golpeado la vivienda de Raji Sourani, fundador de la ONG Centro Palestino de Derechos Humanos, que hace pocos días relataba a elDiario.es cómo vivía la ofensiva de Israel contra la Franja de Gaza, con incesantes ataques por aire, tierra y mar.

Albanese ha dicho a través de la red social X (antes Twitter) que el “icónico defensor de los derechos humanos” parace haber sobrevivido al bombardeo, pero que “es difícil obtener información, no [hay] electricidad, sólo caos” en Gaza.

Además, ha denunciado la campaña militar israelí: “En nueve días, Israel ha matado a casi los mismos [palestinos] que en las cinco anteriores guerras contra Gaza”. Hasta el momento, más de 4.100 gazatíes han fallecido y más de 15.000 han resultado heridos, según el Ministerio de Sanidad palestino.

Pedro Sánchez, que se encuentra este sábado en El Cairo para asistir a la cumbre internacional que busca contener la expansión del conflicto entre Israel y Palestina, se ha reunido en la capital de Egipto y tras su intervención en el encuentro diplomático con Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina. “Le he trasladado nuestro apoyo y la solidaridad con el sufrimiento de la población en Gaza”, ha señalado en su cuenta de Twitter el presidente en funciones.

“España incrementará la ayuda humanitaria y la cooperación a Palestina. El futuro en paz y seguridad pasa por la solución de los dos Estados”, ha añadido.

Este sábado, Sánchez se ha llamamiento del secretario general de la ONU para un alto el fuego humanitario entre Israel y Hamás. Hasta ahora la UE ha evitado dar ese paso y se limita a reclamar que la respuesta de Israel sea acorde al derecho internacional.

El paso fronterizo de Rafah, que comunica Egipto con Gaza, ha quedado de nuevo cerrado este sábado, después de que pudieran acceder a la Franja los 20 camiones de ayuda humanitaria desde Egipto, enviados por la Media Luna Roja de este país y distintas agencias de Naciones Unidas.

Jaled Said, presidente de la Media Luna Roja del Norte del Sinaí (donde se encuentra Rafah), ha dicho a la Agencia EFE que “el cruce está cerrado por los dos lados”, después de que los camiones entraran a Gaza, “descargaran su carga y regresaran a tierras egipcias”.

Said ha agregado que no se sabe cuándo volverá a abrirse el cruce para permitir el paso de ayuda humanitaria o de personas y que, de momento, “no hay información sobre la salida de ciudadanos extranjeros en Gaza”. Estaba previsto que los palestinos-estadounidenses pudieran abandonar la Franja a través de Rafah, en el marco del acuerdo entre EEUU, Egipto e Israel para la entrega de ayuda humanitaria.

El grupo islamista palestino Hamás ha pedido este sábado en un comunicado la evacuación fuera de la Franja de Gaza a los heridos “por la incapacidad” del sistema sanitario del enclave para atenderlos, informa la agencia EFE.

El director de la oficina de medios del Gobierno de Hamás, Salamat Maarouf, ha afirmado que la ayuda que ha entrado por la mañana a Gaza por el paso de Rafah, en la frontera con Egipto, es “limitada” y que no cambia “la catástrofe humanitaria” que vive en enclave, bajo asedio del Ejército de Israel.

Maarouf ha subrayado que lo importante es garantizar el paso seguro de esa ayuda para cubrir las necesidades humanitarias, además de la salida de los heridos para que puedan ser tratados adecuadamente“.

El director también ha hecho hincapié en la importancia de que el paso de Rafah abra de forma permanente y para que pueda entrar ayuda debido a la escasez de combustible y la falta de medicinas y recursos sanitarios, así como comida y electricidad.

El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, ha confirmado por su parte que iba a entrar en la parte sur de Gaza comida, agua y asistencia médica, pero en ningún caso combustible, imprescindible para poner a funcionar la planta eléctrica del territorio.

La ayuda humanitaria que ha entrado este sábado en Gaza por el paso de Rafah, fronterizo con Egipto, solo podrá ser distribuida en el sur de la Franja, pero en ningún caso llegará hasta el norte.

La Agencia de la ONU para los refugiados, UNRWA, ha conformado esta información en la mañana del sábado, según informa EFE.

La agencia Reuters también cita fuentes del Ejército de Israel que aseguran que en ningún caso podrá entrar combustible en la Franja, lo que podría agravar aún más la crisis humanitaria.

El Ejército también ha confirmado que 210 israelíes permanecen secuestrados por Hamás.

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha llegado este sábado a la Cumbre de la Paz de El Cairo, (Egipto) para participar junto con representantes de 34 países en una reunión diplomática sin precedentes para buscar una solución humanitaria a la crisis de Gaza.

Sánchez ha sido recibido por el presidente egipcio Abdelfatah al Sisi, organizador del encuentro, en el centro de convenciones Al Mansa, ubicado en la Nueva Capital Administrativa de Egipto, una ciudad de nueva planta ubicada en mitad del desierto a unos 50 kilómetros de El Cairo.

Este encuentro constituye la mayor movilización diplomática hasta la fecha para tratar la escalada de la violencia entre Israel y el grupo islamista Hamás tras el ataque del pasado día 7 de octubre en territorio israelí, que dejó al menos 1.400 personas muertas, y el inicio de la represalia indiscriminada de Israel contra la Franja de Gaza, que ha dejado ya más de 4.100 víctimas mortales.

Además de Sánchez, han llegado a la reunión el secretario general de la ONU, António Guterres, así como el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel y el rey de Jordania, Abadalá II; el rey de Baréin, Hamad bin Aisa al Jalifa; el emir de Catar, Tamim al Thani; el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás; y el rey de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed, y el primer minstro de Irak, Mohamed Shia al Sudani.

También asiste el presidente de Sudáfrica, Ciryl Ramaphosa, así como la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.

Muchos otros líderes europeos cuya presencia había sido anunciada, como el primer ministro británico Rishi Sunak y el canciller alemán Olaf Scholz, así como el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, están finalmente representados por sus respectivos ministros de Exteriores.

La reunión ha arrancado apenas minutos después de que el paso fronterizo de Rafah, que une Egipto con Gaza, abriera sus puertas para la entrada de ayuda humanitaria, uno de los temas más urgentes marcados en la agenda de la cumbre.

Más de 800 empleados de la Comisión Europea han firmado una carta remitida a la presidenta, Ursula von der Leyen, en la que cuestionan su posición respecto al conflicto en Oriente Medio y, en concreto, su “apoyo incondicional” a Israel. 

“Apenas reconocemos los valores de la UE en la aparente indiferencia demostrada en los últimos días por nuestra Institución hacia la masacre de civiles en la Franja de Gaza, sin tener en cuenta los derechos humanos y el derecho internacional humanitario”, señala el texto que condena enérgicamente el ataque de Hamás “contra civiles indefensos, la pérdida de vidas humanas y la toma de rehenes” al igual que “la reacción desproporcionada del Gobierno israelí contra 2,3 millones de civiles palestinos atrapados en la Franja de Gaza”.

También cuestionan el “doble rasero” de la UE respecto a la distinta reacción a la guerra en Ucrania y el conflicto en Oriente Medio, que advierten de que puede suponer un alejamiento del mundo musulmán.

“Le instamos a pedir, junto con los líderes de toda la Unión, un alto el fuego y la protección de la vida civil”, piden en la misiva. Tanto los gobiernos de los 27 como el Parlamento Europeo han descartado pedir un alto el fuego y se limitan a que el derecho a la autodefensa de Israel se enmarque en el derecho internacional.

La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha confirmado este sábado que veinte camiones con comida, agua y medicinas han entrado a la Franja de Gaza, controlada por el grupo islamista Hamás, a través del paso de Rafah, fronterizo con Egipto.

El vicedirector de la Oficina de Ayuda Humanitaria en los territorios palestinos, Andrea De Domenico, ha informado que la Cruz Roja Egipcia lidera la operación de entrada de la asistencia en la Franja, según la Agencia EFE.

El subsecretario de la ONU para ayuda humanitaria y coordinador de emergencias, Margin Griffiths, ha añadido en un comunicado que la situación humanitaria en Gaza “ha alcanzado niveles catastróficos” y ha expresado su deseo de que esta primera ayuda sea parte de un “esfuerzo continuado para hacer llegar recursos esenciales”.

“El pueblo de Gaza ha soportado décadas de sufrimiento”, ha añadido Griffiths. “La comunidad internacional no puede seguir fallándoles”.

El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS) también ha confirmado el paso del suministro y ha defendido que para cumplir con las necesidades de los habitantes de Gaza, es necesario garantizar “el tránsito seguro de convoyes adicionales, la protección de todos los trabajadores humanitarios y el acceso continuado de toda la ayuda”.

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha llegado este viernes por la noche a El Cairo para asistir a la cumbre internacional que se celebrará en Egipto este sábado para abordar el conflicto en la Franja de Gaza a raíz del ataque de Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre y la posterior respuesta de Israel en forma de bombardeos incesantes desde entonces sobre el territorio palestino.

La jornada arranca sobre las 9.25 (hora peninsular española) con el recibimiento de los jefes de Estado y de Gobierno por parte del presidente de la República de Egipto, Abdel Fatah Al Sisi.

Durante la mañana, Sánchez asiste a las dos sesiones del plenario y terminará con un almuerzo de trabajo.

La cumbre, convocada por el presidente egipcio, abordará la actual situación en la región y la aguda crisis humana en Gaza, así como el futuro de la causa palestina y el proceso de paz, ha precisado Moncloa en un comunicado que enmarca esta cita en el esfuerzo para “movilizar a la comunidad internacional con el objetivo de frenar la actual espiral de violencia y buscar soluciones al conflicto”.

El presidente está acompañado por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares.

A la cita del sábado organizada por el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, está previsto que asistan varios líderes de la región así como algunos europeos y el secretario general de la ONU, António Guterres.

Europa Press

Israel ha emitido este sábado una advertencia de viaje para que sus ciudadanos no vayan a Egipto, Jordania o Marruecos ante el riesgo de que sean objetivo de ataques en plena guerra con las milicias islamistas palestinas de Gaza.

En un comunicado conjunto de la Agencia de Seguridad Nacional, la Oficina del Primer Ministro y el Ministerio de Asuntos Exteriores, se pide también a los israelíes que estén en estos países que los abandonen “lo antes posible”.

“Debido a la continuación de la guerra, en los últimos días se ha detectado otro importante recrudecimiento de las protestas contra Israel en varios países, especialmente en los países árabes de Oriente Medio, junto a muestras de hostilidad y violencia contra símbolos israelíes y judíos”, indica el comunicado.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, celebró este viernes la liberación de dos estadounidenses secuestradas por Hamás durante el ataque a Israel, y prometió que no parará hasta lograr que el resto de rehenes queden en libertad. “Desde los primeros momentos del ataque, hemos estado trabajando día y noche para liberar a los estadounidenses que fueron tomados como rehenes por Hamás, y no hemos frenado nuestros esfuerzos para lograr la liberación de los que siguen retenidos”, explicó en un comunicado.

Biden recalcó que, como presidente del país, no tiene “mayor prioridad” que garantizar la seguridad de todos los estadounidenses secuestrados en el extranjero.

El mandatario tuvo además una llamada con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, con quien abordó “los esfuerzos en curso para la liberación de los rehenes de Hamás” y la apertura de “un corredor seguro” para que los estadounidenses y otros civiles puedan salir de la Franja de Gaza, según informó la Casa Blanca.

Líderes de todo el mundo abordarán este sábado en Egipto la crisis de Gaza, una cumbre diplomática sin precedentes liderada por el país árabe que busca contener la expansión del conflicto, lograr una solución humanitaria para el enclave bajo asedio y abordar de forma integral la “cuestión palestina”.

Ésta será la mayor movilización diplomática hasta la fecha para tratar la escalada de la violencia entre Israel y Hamás. Aunque no se conoce el número total de asistentes, la televisión estatal egipcia Al Qahera News ha señalado que asistirán 31 países y tres organizaciones internacionales encabezadas por el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres.

La cumbre se celebrará en la Nueva Capital Administrativa, una ciudad de nueva planta creada en el desierto por el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, a unos 50 kilómetros al este de El Cairo. La falta de confirmación de un alto cargo estadounidense ha sembrado dudas sobre los posibles resultados del encuentro.

El presidente en funciones de España, Pedro Sánchez, y el responsable de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, estarán allí junto con el presidente de Francia, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Olaf Scholz; la primera ministra italiana, Giorgia Meloni; el primer ministro británico, Rishi Sunak; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, según las fuentes de la cadena.

La cadena egipcia sostiene que Estados Unidos enviará a su enviado especial para Oriente Medio, David Satterfield, que China también estará presente con su enviado para la region, Zhai Jun, y que Rusia enviará a un representante. Entre los países árabes, particularmente afectados por el conflicto, estarán presentes, además de Al Sisi, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás; y el rey de Jordania, Abdalá II.

También estará el emir de Catar, el secretario general de la Liga Árabe, el presidente de Irak y el primer ministro de Emiratos Árabes Unidos. Arabia Saudí enviará un representante. Del mismo modo, están invitados el presidente sudafricano y el presidente de la Unión Africana. Marruecos, Noruega, Túnez, Argelia, Mauritania, Brasil y Turquía tendrán representación, según la cadena egipcia.

Mientras tanto, la ayuda humanitaria sigue esperando en el paso fronterizo de Rafah entre Gaza y Egipto. Imágenes satelitales de Maxar muestran al menos 90 camiones esperando a entrar en la zona asediada por Israel. La primera entrada será de 20 camiones, pese a que antes de la guerra necesitaba 100 diarios.

Informa Javier Biosca.