40 años de Barrio Sésamo

La popular serie televisiva cumple 40 primaveras. Para celebrarlo, multitud de personas se han acercado a la Gran Manzana para acompañar a Coco, Elmo, el monstruo de las galletas o a la Gallina Caponata en su cuarenta aniversario.

En España esta popular serie se hizo famosa con la aparición, por primera vez en televisión, de un erizo de color rosa. El particular personaje del que se ha dicho que dormía con pijama mientras por el día paseaba desnudo fue un ídolo en los años ochenta, cuando las dos únicas cadenas nacionales emitían, en blanco y negro para casi todos los hogares, la mítica serie que reunía ante el televisor a mayores y pequeños de la casa.

Las aventuras de Espinete y Don Pimpón, su inseparable compañero. Las desventuras de Chema, el panadero, siempre rodeado de harina y masa; las canciones animadas de los niños del “Barrio” que acompañaban a Espinete en sus andaduras... además del Conde Drákula, que con su peculiar humor enseñaba a los niños a contar, Coco, que tenía siempre una lección que enseñar, o el monstruo de las galletas que no conseguía encestar en su enorme boca ni una migaja de los dulces que comía.

¿Quién no recuerda cómo aprendió aquella generación de los ochenta a contar con las bolas locas de colores? ¿Quién no aprendió a distinguir la izquierda de la derecha según las enseñanzas de Coco, o a atarse los cordones de los zapatos siguiendo las doctrinas de tan peculiares “monstruos de la tele”? Sin olvidar a la pareja de hermanos más famosa de la televisión, Epi y Blas, el uno con voz susurrante y cansina, el otro con voz de pito y un tanto irritable con las incesantes preguntas de su hermano; o al crustáceo más famoso del mundo, el reportero más dicharachero de Barrio Sésamo y de toda la faz de la Tierra, la Rana Gustavo.

Me viene a la memoria cada vez que pienso en Barrio Sésamo aquella canción que decía: “Pintar, pintar, pinta sin parar...” o esa en la que Espinete se describía como un erizo con púas en las espalda para no pinchar a quien le diese un abrazo.

Un elenco de personajes entrañables que quedará en la memoria de todos aquellos que crecieron con sus aventuras y que todavía hoy recuerdan muchos de los valores y enseñanzas que esta serie trasmitió a toda una generación.