Agatha Ruiz de la Prada en Cibeles
La diseñadora madrileña se ha inspirado en una Galería de Arte Contemporánea para plasmar en los tejidos y diseños de la colección Otoño-Invierno 2009-2010 las pinceladas de sus artistas más queridos.
Los brochazos de Jackson Pollock, las composiciones de Vasarely, la geometría de Piet Mondrian o los encadalosos puntos de Yayoi Kusama han sido la fuente de inspiración de Ruiz de la Prada a la hora de colorear los sencillos vestidos o las camisetas de punto.
Para el día se inventa una mujer que se viste con camisetas con nuevas reinterpretaciones de los temas de la modista, vestidos con muchos cortes, en patchwork, rayas en distintos tejidos, aplicaciones de ganchillo en cuellos y bolsillos en falso pelo, para las más atrevidas, los pantalones tipo legging siguen de moda.
Y para la noche nada de negros, vestidos alcochados con botones chester y astracan ecológicos en colores muy fuertes. Los vestidos largos no pueden faltar en la colección 'nocturna', son de amplio.volumen con pliegues, volantes e incluso franjas multicolores.
Como accesorios, la mujer Ágatha se complementa con bolsos volantes o combinados con pieles y zapatos salón de altísimos tacones en patchwork y botas igualmente altas.
La colección Ágata Ruiz de la Prada se pinta de todos los colores vivos, fucsias, naranjas, rojos, amarillos, morados y azulones que se combinan de todas las formas posibles, camisetas con faldas, pantalones con chaquetas-capas, gabardinas con legging, chaquetones con vestidos... Y en la pasarela también, donde grandes puffs en forma de corazón acompañaron a las modelos que salieron a lucir las propuestas de Ágatha con tocados en la cabeza en alegorías al arte de pintar, con brochas, paleta y botes de colores.
Próximo turno para Francis Montesinos y Jesús del Pozo. En la jornada vespertina será para Devota & Lomba, Amaya Arzuaga, Ángel Schlesser, Miguel Palacio y José Miró.
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