Ban Ki-moon y Bill Clinton discuten medidas para la reconstrucción de Haití
El enviado de Naciones Unidas para Haití, Bill Clinton, se ha reunido con el Secretario General de la organización internacional para discutir medidas prácticas con el objetivo de ayudar al país a salir de la pobreza y a mitigar los efectos de los desastres naturales que le han asolado.
En una rueda de prensa, el ex presidente norteamericano ha declarado su interés por la situación de Haití durante más de tres décadas. También ha afirmado que “a pesar de la devastación total causada por las cuatro tormentas del año pasado, Haití tiene la mejor oportunidad de salir de la etapa más oscura de su historia”.
Las buenas expectativas de Clinton con respecto a Haití se deben al liderazgo del presidente René Preval, y del primer ministro Michele Pierre Louis; así como a la contribución de la Misión de Estabilización de la ONU (MINUSTAH) y de la Policía Nacional, según explicó en su comparecencia ante los medios.
Bill Clinton asegura que las prioridades de su trabajo en Haití se centran en la reconstrucción de los sitios destruídos por los huracanes del año pasado, la recuperación ambiental y el desarrollo de energías limpias. Para estos fines, alentará al sector privado a invertir en la zona, y buscará asistencia de ONG para mejorar la entrega de los servicios esenciales.
El pasado 10 de junio, la relatora especial de la ONU sobre las formas contemporáneas de esclavitud, Gulnara Shahinian, expresó una profunda preocupación por otra de las lacras que envuelven la situación político-social de Haití, la de los miles de niños que actualmente viven en situaciones de explotación en este país.
Tras realizar una visita al país caribeño, Shahinian explicó que había visto que los menores son sometidos al sistema conocido como “restavek”, por el que los padres pobres o de áreas rurales envían a sus hijos a la ciudad con otras familias para realizar las tareas domésticas. Señaló que estos niños sufren múltiples formas de abuso, que incluyen la explotación económica, el castigo corporal y la violencia sexual.
La experta recomendó al gobierno haitiano lanzar una campaña de sensibilización sobre los peligros de la práctica del “restavek” y tomar las medidas que aseguren la educación primaria para todos los niños.
También hizo llamamientos a instituciones internacionales, encomiando avances como la creación de la “Brigada de Protección de Menores” y los esfuerzos hechos para la infancia del Instituto de Bienestar Social e Investigación.
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