¿Cómo evitar que nuestros hijos se hagan adictos al ordenador y el móvil?

Desde hace casi diez años hemos empezado a conocer casos de jóvenes adolescentes que han hecho un uso abusivo del móvil, los juegos de ordenador o Internet. Es un problema que de momento sólo es llamativo, porque todavía no es demasiado frecuente, pero que puede convertirse en una fuente de graves preocupaciones para los padres. Lo que hay que hacer es quitarse la venda de los ojos y calibrar si uno de nuestros hijos pasa más tiempo del que sería razonable delante del ordenador o usando el móvil.

La necesidad de informar a los padres sobre las ventajas e inconvenientes de las nuevas tecnologías ha permitido la aparición de empresas y gabinetes de comunicación como es el caso de Adicciones Digitales (www.adiccionesdigitales.es) , organización agrupada en la Asociación para el desarrollo de Internet y las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación(AINTIC), y legalmente reconocida por el Ministerio del Interior desde hace más de diez años.

Adicciones Digitales imparte por toda España conferencias, charlas y coloquios especialmente dirigidos a padres y educadores; una actividad que se desarrolla tanto en colegios como en pymes y grandes empresas. Ha promovido la publicación del libro Uso y Abuso de las Tecnologías presentado en la Feria del Libro de Madrid de 2006 y editado por Sekotia.

Juan Manuel Romero es Vicepresidente, Director de Proyectos y Portavoz de Adicciones Digitales. Él nos ha explicado en qué consiste la labor que se desarrolla esta organización.

¿Cuándo comenzó su actividad?

Comenzamos a elaborar contenidos sobre la adicción a la tecnología hace diez años, cuando se empezó a ver que el problema podía llegar a mayores. En aquellos momentos el teléfono móvil y el ordenador asociado a Internet eran una interesante novedad que había llegado a la mayoría de los hogares españoles, sobre todo el móvil. El problema es que no se conocían las consecuencias del uso indiscriminado y abusivo de esta tecnología, sobre todo por parte de los niños y adolescentes.

¿Por qué el nombre de Adicciones Digitales?

Cuando iniciamos nuestra actividad nos planteamos la necesidad de llegar a la gente y contar con un nombre fácil de reconocer y recordar. Cierto es que se trata de un nombre (www.adiccionesdigitales.es ), algo largo de teclear cuando queremos entrar en la web, pero, sin embargo, es fácil de recordar. Adicciones porque luchamos contra esas actitudes nefastas para la persona, y Digitales viene de la actividad a la que nos dedicamos, que es todo lo tecnológico.

¿Cuál es la actividad divulgadora que desarrollan ustedes?

Nuestra principal actividad consiste en impartir conferencias y participar en charlas y coloquios para explicar cuáles son los problemas que se pueden encontrar las familias cuando alguno de sus miembros hace un uso indiscriminado y abusivo de la tecnología. No se trata de tener miedo a las novedades que se nos presentan en el mercado y en la sociedad, pero sí de ser prudentes. Nosotros no damos soluciones sino que prevenimos el problema. Las soluciones cuando se producen situaciones extremas e indeseadas, tienen que venir de profesionales de la medicina: psicólogos, psiquiatras y demás.

¿Podría poner el ejemplo de alguna de esas situaciones extremas a las que se refería?

En ocasiones nuestros hijos tienen el móvil o Internet como una parte esencial de sus vidas y esto no debe ser así. No podemos consentir que nuestros hijos se acuesten todas las noches con el móvil en la mano y puesto en modo de silencio y vibrador. Esto lo hacen para recibir mensajes de texto de sus amigos sin que se enteren sus padres. En caso de que reciban esos mensajes se despertarán para contestarlos y si no los reciben se verán sometidos a un estrés tremendo e innecesario, porque se considerarán olvidados o marginados por su grupo. Son casos extremos que hemos de tener muy en cuenta.

Tampoco podemos tolerar que nuestros hijos, a no ser que tengamos una fe ciega en ellos, tengan su ordenador con conexión a Internet en su habitación y cierren la puerta cuando estén dentro, porque no sabemos si a las tres de la madrugada van a estar durmiendo o conectados a Internet. Son normas básicas de prevención, nunca de solución, que deben tener en cuenta los padres y que deben ser conocidas por los educadores de esos adolescentes para que, en un momento dado, se las faciliten a los padres mediante circulares o cualquier otro sistema de comunicación.

¿A qué publico dirigen ustedes sus conferencias, charlas y coloquios?

Nosotros nos dirigimos principalmente a padres y educadores. Pretendemos facilitarles una guía de actuación para que sepan cómo afrontar ciertos problemas antes de que estos surjan. A los padres, sobre todo, esto de la tecnología les sobrepasa en muchas ocasiones y no se dan cuenta de que sus hijos pueden abusar de ella, ni tampoco son conscientes de las desastrosas consecuencias que pueden tener estos abusos.

Las conferencias las impartimos principalmente en colegios y centros de trabajo. En el primero de los casos la organización del evento corre a cargo de la dirección del centro que es la que se encarga de avisar a los padres. En el segundo supuesto se trata de medianas y grandes empresas, principalmente, que quieren facilitar a sus trabajadores un valor añadido. La compañía financia el coste de la conferencia o el seminario y el trabajador puede acceder a ella durante su jornada laboral. Se trata de una inversión razonablemente amortizada porque si le evitamos un problema a nuestro empleado seguramente trabajará mejor que si no se lo evitamos. Es decir, si dentro de un año alguien de la plantilla tiene problemas con sus hijos y la tecnología porque no hemos facilitado medios para evitarlo, quien se resentirá es la empresa porque mientras ese trabajador esté preocupado por la situación que vive en casa no rendirá lo que esperamos de él en la compañía.

Se trata de una inversión a corto y medio plazo que a veces corre a cargo de los colegios o empresas y en otras ocasiones de ayuntamientos o comunidades autónomas. También las asociaciones de padres y madres de los colegios contactan directamente con nosotros para que les demos una charla.

¿Qué es lo más gratificante de su actividad?

Lo que más satisfacción nos produce es abrir los ojos a los padres para ayudarles, en la medida de nuestras posibilidades, a conocer un poco más este complejo mundo de la tecnología, que a ellos les supera pero que sus hijos controlan con absoluta naturalidad.

Para terminar ¿podría contarnos alguna anécdota de sus charlas por toda España?

Hay dos curiosas, aunque no son las únicas. La primera: yo siempre recomiendo que el ordenador se ponga en un lugar común de la casa, una zona de paso donde los padres puedan ver lo que hacen sus hijos de un rápido vistazo según pasan. En Segovia una madre me comentó, cuando les di este consejo, que ella tenía el ordenador en la cocina y mientras ella hacía las croquetas sus hijos podrían hacer los trabajos del colegio. Ellos estaban controlados pero no vigilados.

El segundo ejemplo es el de una madre trabajadora que no estaba en todo el día en casa y cuya hija adolescente de trece años estaba permanentemente conectada al ordenador. La madre me contó que estaba tan harta que había quitado el teclado del ordenador a su hija para que no usase el Messenger. Yo le explique a la pobre mujer que la niña podía ir a un chino y comprar un ratón por dos euros. También podía ir a una tienda de informática y por veinte euros comprar un ratón inalámbrico, que la niña se llevaría en el bolsillo, sin tener que enchufarlo y desenchufarlo, cada vez que utilizase el ordenador. Además le expliqué que los adolescentes manejan perfectamente el teclado y pueden navegar por internet sin necesidad de usar el ratón. Por último le dije que algunos ordenadores son táctiles y se manejan presionando con los dedos sobre la pantalla. La pobre mujer se dio cuenta de que no había hecho mucho, pero me lo agradeció y dijo que buscaría otras fórmulas para evitar que su hija pasase todo el día enganchada al Messenger.

Juan Manuel Romero, periodista. Vicepresidente y Portavoz de AdiccionesDigitales.es, organización que se dedica a la promoción del uso saludable de las nuevas tecnologías en el ámbito familiar, docente y laboral impartiendo conferencias en colegios, instituciones y empresas dirigidas a padres, educadores y profesional en general para prevenir posibles tecnoadicciones.

Dirección web: www.adiccionesdigitales.es

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