Destinos sorprendentes

¿Harto de las mismas playas o montañas? ¿Cansado del chiringuito de siempre y de las mismas tapas? ¿Buscas acción a raudales para liberarte de tu rutina laboral y regresar al trabajo como nuevo? Pues si tienes unos buenos ahorrillos, el corazón a prueba de bombas y, lo que se dice, un buen par... te proponemos unos destinos cuanto menos arriesgados para tu próximo puente o Semana Santa. ¡No aburras más a tus compañeros de trabajo con las típicas insulsas fotos! ¡Haz que se mueran de envidia y te consideren el nuevo Indiana Jones de la oficina!

Bucea con tiburones-ballena en Donsol, Filipinas: Sin equipo de buceo. Sin tracción subacuática. Sólo el gigante y tú. Con que te mantengas a unos tres metros del bicho y no te cruces en su camino podrás salvar la vida y llevarte un recuerdo imborrable.

Conduce la Nuerburgring en Norburgo, Alemania: Sin límites de velocidad. Al módico precio de 22 euros por vuelta. Conduce en la conocida como 'pista más peligrosa del mundo' y descarga toda tu adrenalina al volante. Solamente recuerda abrocharte bien el cinturón.

Corre los toros en Tamil Nadu, India: Pamplona está demasiado cerca y el encierro no es tan peligroso como éste. Tienes que ponerte bien cerca del toro para intentar coger el dinero que cuelga de sus cuernos. ¡Toda recompensa merece un sacrificio! Considérate afortunado si regresas con los mismos agujeros con los que te fuiste.

Esquía lanzándote desde un helicoptero en Alaska: Móntate en un helicoptero. Vuela a más de 6000 metros sobre la montaña Chugach de Alaska... Y lánzate sin miedo porque tienes que salir decidido en el vídeo. La excursión incluye tu propio cámara que grabará tu descenso, sea sobre los esquís o sobre la cabeza.

Bucea metido en una jaula rodeado de tiburones en Suráfrica: Si lo de los tiburones-ballena no te llenó lo suficiente, prueba a rodearte de estos tiburones blancos y verlos en su espacio natural de caza. Procura no salir de la jaula para no convertirte en su próximo aperitivo y tendrás algo impresionante que contar a tu vuelta al trabajo.

Surfea las 'Jaw' en Peahi en Hawai: Nada como una surfeada en las Jaw hawayanas, olitas de más de diez metros, para quitarte ese tonto miedo al mar. No te preocupes, nadie ha muerto todavía cogiendo estas olas. Trata de no convertirte en el primero en hacerlo y asunto resuelto.

Cruza el Sahara en bicicleta: Aunque suene a locura de remate puede hacerse gracias a packs de hidratación y sistemas GPS. Además seguro que pierdes esos kilitos de más a base de sol y pedaleo. ¡Mejor que un balneario!

Escala sobre hielo en Canadá: Uno de los deportes extremos más peligrosos. ¡Cambia el senderismo por esta modalidad de escalada tan fascinante sobre paredes congeladas!

Practica el Sandboard en Cerro Blanco, Perú: No te canses de esperar el invierno y visita uno de los sitios con las dunas más altas del planeta. Súbelas durante unas tres horas y tírate por 800 metros de descenso con tu tabla. Puede que no te hagas daño al caer, pero tendrás arena durante un buen tiempo por todos los resquicios de tu cuerpo. Sin duda no te olvidarás tan fácilmente de esta experiencia.